Jugada Final (Chicas Gordas #3) BORRADOR

Capítulo 19. Intermedio

~Capítulo 19~

Intermedio 

Ian 

El sonido estruendoso y macabro de un relámpago me despertó a las 3 de la mañana, sentía que la cabeza me iba a explotar y me sentí mareado por un momento no sabía dónde estaba, sólo sé que me encontraba tendido con uno de mis pies colgando en una cama muy cómoda y completamente desnudo. Me senté a regañadientes y me lleve la mano a la cabeza, mire a mi alrededor para darme cuenta de que me encontraba en mi habitación, en la fría y sombría habitación del apartamento que compartía con Cassidy, entonces todo llegó a mi mente, la chica de cabello largo y yo teniendo sexo en la sala de descanso y luego.

—No—Me dije a mi mismo —No le hice eso—Me puse de pie rápidamente y todo me dio vueltas, pero no permite que aquello me detuviera, me puse un pantalón de franela lo más rápido que mi maldito estado de embriaguez me permitió y fui corriendo a la habitación de Cassie.

La puerta de la habitación de Cassie estaba abierta de par en par, entre despacio pero ella no estaba ahí. La cama estaba desarreglada, la cinta roja colgaba en el respaldo de la misma y unas pequeñas manchas de sangre salpicaban la sabana, mi estómago dolió como la mierda y sentí un dolor tan fuerte en el pecho que pensé iba a desmayarme, apreté las sábanas en mis puños y me maldije interiormente, había perdido la cabeza, había perdido el control y le había hecho daño a lo único bueno en mi vida, a la única persona que he amado, Cassidy.

Escuche pasos detrás de mí y rápidamente me puse de pie, una figura grande y robusta apareció frente a mí—La lleve al hospital —dijo Blake con la mandíbula apretada —Ahora sí que ha jodido todo señor.—Di unos golpes sobre la cama a sabiendas de que esto no arreglaría nada y luego salí de aquella habitación, no soportaba estar allí.

— ¿Donde la llevaste?—pregunte sin poder mirarlo a los ojos.

—Es mejor que se mantenga al margen del asunto, avise a su prima la señorita Theresa, le dije que sufrió un accidente—Me gire con la rabia corriendo por mis venas y lo tomé por el cuello de su camisa, pero lo solté, debía calmarme debía pensar fríamente cuál sería mi próximo paso, debía arreglar este desastre y no podía permitir que Cassie se me escapara de las manos.

— ¿Estaba muy mal?— Mire a Blake y pude ver como arrugaba su rostro, me di unos golpes en la cabeza porque aunque me mataba el dolor, me mataba más saber que había lastimado a Cassidy y al parecer le había hecho mucho daño.

—Su costilla—dijo y sentía que se estaba conteniendo— Esta rota—Continuó y apreté los puños con fuerza. Yo era una bestia, un animal sin compasión en la jaula pero nunca con ella.

—Llévame donde está...

—Señor—Dijo Blake pero no deje que hablara.

— ¡Maldita sea! Llévame con ella —sentí mis ojos escocer, pero reprimí aquel deseo golpeando con fuerza la pared, mis nudillos se tiñeron de rojo, pero aquel dolor no era nada comparado con lo que sentía por dentro, porque sabía que Cassie no me amaba, pero había matado quizás la mísera estima que ella sentía por mí y me negaba, me negaba a dejarla ir, me negaba admitir el hecho de que ella estaba enamorada de otro y por eso mi Yo egoísta, ese que me superaba siempre, ese que la tenía retenida a mi lado daría el siguiente paso, porque la haría entender que si le hice eso a ella, que no le haría al imbécil de Jack Howard?

—Preparare el vehículo—Y yo decidí poner en marcha mi próxima jugada.