Jugada Final (Chicas Gordas #3) BORRADOR

Capítulo 12. Oscuridad

Capítulo 12

Oscuridad

Cassie

Sentada en medio de aquel salón me había dado cuenta de lo desgraciada que era mi vida. Había ocultado mi cara hinchada de tanto llorar, bajo capaz y capaz de maquillaje y mi madre compartiendo mi desdicha había hecho lo mismo. Aún no podía creer que mi padre había firmado aquella cláusula con los Magcord, aún no entendía como había puesto a su propia hija como garantía sólo para seguir alimentando su propio ego y no podía dar crédito que estaba aquí para comprometerme con Ian...

-Vamos a encontrar con sacarte de esta- Susurro Theresa, ella y sus padres habían sido invitados de honor para presenciar este teatro y sabía que mi padre sólo quería restregarles en la cara que él mandaba.

Después de haber tenido la certeza de que todo comenzaba a encajar en mi vida, Tom me había llamado, pensé que era para tratar de convencerme otra vez de que volviera aunque la última vez que hable con él sus palabras habían puesto mi piel de gallina -Quieras o no quieras tendrás que regresar Cassidy Blare, te lo pedí por las buenas, por las malas no te va a gustar. Y ahora entendía a qué se refería, esto era más que por las malas mi padre me había arrastrado al infierno...

-No te atrevas a derramar una lágrima -Me dijo Litzy quien estaba con la mandíbula apretada, la arrastre conmigo y cuando le conté todo aquel domingo por la noche no dudo en darme todo su apoyo.

Tom Blare seguía siendo el hombre más vanidoso y avaricioso de este mundo aún no comprendía como una mujer como mi madre tan humilde y sencilla se había fijado en un hombre como él, como había soportado tantos años a su lado y dicen que el amor todo lo soporta, pero creo que mi madre había hecho más que soportar. Y cuando llegue a casa aquella mañana después de la llamada de mi padre arremetí contra ella, como era posible que se hubiese prestado a venderme sólo para cuidar los intereses de su esposo, en ese contrato se leía claramente que si Yo no cumplía con lo estipulado ellos perderían todo, los Magcord habían acorralado a mis padres y ellos habían caído en su trampa. Nunca, ni en mis pesadillas más horrible había pensado casarme con Ian Magcord lo detestaba y ahora a él se encontraba a mi lado con una sonrisa radiante disfrutando de aquella insana situación...

Mi padre arrastró a mi madre al centro del salón donde se encontraban los padres de Ian. Cassia me miró con tanta tristeza que pensé que iba a romperme en aquel momento pero Litzy me dio un apretón de manos para recordarme que no debía llorar y entonces como si lo hubiesen mandado Jack llegó a mi cabeza. Ni siquiera tuve las agallas para poder mirarle a los ojos cuando le dije que todo había sido sólo un buen momento, cuando me tomo por los brazos y me atrajo hacia él tuve que alejarme como si me repugnara aunque lo único que deseaba era quedarme en sus brazos, pero no podía arrastrarlo conmigo, Jack merecía mucho más y pensar que lo había decepcionado me partía en mil pedazos el corazón...

-Es más que un honor para mí-dijo mi padre sacándome de mis pensamientos -Presentarles a los futuros esposos.

Ian me tomo de la mano y me arrastró con él al centro del salón, quería que la tierra me tragara en aquel momento, quería poder desaparecer de la faz de la tierra, quería aunque suene duro y cruel morir en aquel mismo instante. La gente me sonría con suficiencia y me miraba de arriba abajo, todos a mi alrededor habían conocido a otra Cassie, está de pie frente a ellos no era ni la sombra de aquella mujer vanidosa. Mire donde se encontraban mi prima y Litzy y la tristeza en sus rostro fue suficiente para incrementar la mía y sin darme cuenta en un segundo todo se había apagado a mi alrededor y me desplome en medio de aquel salón lleno de gente.