Capítulo 26. Deseo De Muerte

2.5K 273 4
                                    

Capítulo 26

Deseo De Muerte

Jack

Las primeras veces no siempre son como las pensamos. Porque aquí, encerrado en esta celda a la espera de que mi padre apareciese en cualquier momento me di cuenta de que no todo el que estaba a mi alrededor era una persona terrible, más terrible muchas veces era el abuso de poder, por ejemplo el chico que está a mi lado agredió a un hombre por propasarse con una chica y se preguntaran ¿porque razón entonces está el encerrado y no aquel hombre?, por la misma razón por la que me encuentro yo aquí en vez de Ian Magcord.

—Jack Howard—Dijo uno de los agentes y lo mire con cansancio mientras me despedía con un gesto de la cabeza de Billy, así se llamaba el chico junto a mí.

—Recuerda que tu no hiciste nada malo—Dijo con una sonrisa de medio lado—Los canallas siempre terminan pagando.

El oficial abrió la puerta de la celda pero antes de salir del todo mire a Billy por última vez, nos encontrábamos prácticamente en la misma situación pero al contrario de mí, él no tenía alguien que lo respaldara y aunque me costaba un ojo de la cara admitirlo mi padre era un hombre que se preocupaba por sus hijos, quizás no hizo lo suficiente por arreglar las cosas con mi madre y lo entiendo, porque es imposible perdonar cuando alguien te traiciona de la manera en que ella lo hizo con él, pero en lo que respecta a mi hermano y a mí nunca nos ha desamparado.

James Howard me miro con decepción, pero no dijo una palabra, siempre ha sido medido y premeditado sabía que estaba buscando las palabras correctas y devanándose los sesos buscando la razón por cual yo casi había matado a otro a golpes, nunca había sido abierto con él, aunque si, aquella vez cuando estuve enamorado de Lía fue el primero en darme su total aprobación, decía que aquella chica silenciosa y juiciosa era todo lo que necesitaba para equilibrar mi vida, también me recrimino cuando Robin me la arrebato.

—¿Por qué? —pregunto tan tranquilamente que me asusto y lo mire con recelo, sabía que estaba esperando que mi respuesta fuese más que convincente.

—Es doloroso y abrumador saber que la persona que amas sufre por ti, darte cuenta que sin importar todo lo que tenga que pasar esa persona te protege por sobre todas las cosas, darte cuenta que sí, que es posible y que a pesar de las decepciones existe alguien allí afuera que daría la vida por ti, no necesito que me entiendas James, tampoco voy a decirte que estoy arrepentido, porque si tuviese que partirle la cara de nuevo a ese chico no dudaría en hacerlo —Cuando levante la vista y lo mire, pude ver aquello que hace mucho tiempo no veía en su mirada, compasión. Mi padre era el vivo ejemplo de que el amor muchas veces era demasiado doloroso y había perdido la compasión por los demás.

—Solo piensa en tu carrera también Jack, un quarterback problemático no llega a ningún lado—Asentí ante sus palabras porque comprendía más que nadie que mi padre solo quería lo mejor para mí, pero también le haría comprender que siempre cuidaría de Cassie con todo y contra todos.

***

Aquel lunes por la tarde después de haberme pasado todo el fin de semana encerrado y sin saber nada de Cassie un oficial de policía fue a visitarme a la casa fraternidad, los demás chicos se quedaron en la sala continua en muestra de su apoyo hacia a mi y se los agradecía porque había comenzado a comprender que ellos no solo me respetaban, también era parte de ellos, parte de esa familia que no es de sangre pero que siempre estará ahí en buenas y malas.

—Se que se preguntara que hacemos aquí—Miré al agente con cierta ignorancia, porque si era respecto a lo sucedido mi padre me había dicho que el asunto había quedado zanjado —Ian Magcord ha levantado una denuncia en contra de usted—El oficial se quedó mirándome fijo a los ojos como esperando algún tipo de reacción fuera de lugar, pero me mantuve sereno.

—¿Quiere que lo acompañe ahora señor oficial?—dije aquellas palabras con el ultimo gramo de resistencia que tenía, su rostro se endureció, negó con la cabeza y las palabras que pronuncio a continuación me dejaron congelado.

—La señorita Blare levanto una denuncia en contra de Ian Magcord —Hizo una corta pausa y miro a su compañero—Por violación— Levante una mano para que no siguiera hablando y acto seguido apreté mis manos en puño y todo el odio que descargue sobre Ian aquel día estaba regresando ahora con más intensidad, aquel hombre me miro con pena y me odie por no haberla podido proteger.

Despedí al oficial y este me dijo claramente que era posible que me llamasen para declarar si se celebrara algún juicio, no dude en decirle que así sería porque si de algo estaba realmente seguro era de que deseaba que ese hijo de perra pagara por todo el daño que le ha hecho a mi chica...

—Todos estamos contigo y con Cassie.—La voz de Ethan me trajo de vuelta a la realidad en cuanto cerré la puerta detrás de mí.

—Solo quiero verlo hundido—Dije con frialdad y sin apartar de mi cabeza el deseo de ver muerto a Ian Magcord que rondaba de manera peligrosa por mi mente.

Jugada Final (Chicas Gordas #3) BORRADORDonde viven las historias. Descúbrelo ahora