La espera

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Cuando Adrien hablo con Gabriel este se negaba a creer en el Maestro Fu, pensaba que era una trampa para quitarle el milagro y el pergamino sagrado. Solo cuando Adrien prometió que si el remedio del Maestro Fu no funcionaba le quitaría el milagro a Lady Bug accedió a intentarlo. 

- Ah, My Lady, ... - pensaba el rubio -Creo que no es lejano el día en el que tengamos que dejar el milagroso. Quisiera saber antes quien se esconde tras la máscara ... Aun así quiero creer en que podemos hacer cualquier cosa- Dijo al viento. 

Adrien no toleraba el encierro en casa, sabía que al menos esa noche no tenía un akuma pero tenía que salir y tomar aire.

En su mansión Gabriel Agreste estaba inmerso en una ambivalencia, estaba mejor desde que compartía la carga del secreto de Emilie con Adrien, incluso acaricio un poco de esperanza para el futuro con la nueva solución que proponía Wang Fu, un ritual complicado para atraer a su esposa de vuelta, pero al mismo tiempo desesperaba por la falta de avances en el asunto.

Sin embargo, era un hombre de palabra que había prometido a su hijo tener paciencia y esperar por las instrucciones del guardián.

Adrien tampoco la pasaba muy bien, los secretos y las mentiras eran algo relativamente nuevo para él, estaba llegando al límite de su resistencia, mirando a los ojos a Lady Bug y fingir que nada nuevo pasa, buscar akumas que sabía que nunca llegarían y de nuevo fingir sorpresa e ignorancia mezclándolos con una copia artificial y algo forzado de su desenfado habitual.

Cuando volvió a ver a la heroína ella le pregunto si ya había visto al Maestro Fu, él respondió con evasivas al respecto. Luego se le ocurrió decir que sospechaba que él había provocado la akumatización del bosquimano por comentarios hechos a la ligera al pobre hombre y se sintió culpable. Lady Bug se identificaba con ese sentimiento de culpa, ella sin querer había tenido la akumatización de mas de una persona como Andre el heladero, Max y su abuela, por lo que le dio las palabras sinceras de ánimo, incluso lo abrazo, haciendo que bajo la máscara Adrien se sintiera falso, mentiroso, indigno de ella. 

Adrien sabia que no había opción, hay resistir la farsa un poco más. solo faltaba dos semanas para terminar todo, terminar las mentiras, además de terminar la escuela, terminar las verdades a medias, los secretos, y tal vez tal vez con un poco de suerte , su madre volvería.

Adrien llego a la escuela un poco mas tarde de lo regular, habían terminado las clases hacia dos semanas, ahora solo iban a recoger calificaciones y esperar resultados. Gracias a la dedicación y la disciplina a la que estaba acostumbrado él se graduaría con el mejor promedio de su generación. Sin embargo bajo su calmado exterior su cabeza era un lío, caminaba metido en sus pensamientos, pasaba de Chat Noir y el ritual que cada vez era más complicado a las calificaciones faltantes, iba sin ver por donde cuando choco con alguien.

- Ho-ola Adrien disculpa no te vi. –Dijo Marinette completamente sonrojada.

- No hay problema, Marinette.

Marinette se dio cuenta de algo le pasaba, Adrien no era el de siempre estaba muy distante y extraño, algo le molestaba pero no llegaba a imaginar que.

- ¿O-oye estas bien?

- Si no me lastimaste -contesto con una sonrisa triste- ¿y tu?.

- Somos amigos no Adrien, dime qué te pasa, no voy a creer que estas así por los resultados finales de la señora Mendeleieve, sacaste sobresaliente como siempre.

- Estoy muy cansado Marinette, - suspiro- ¿alguna vez has sentido como si todo el mundo esperara demasiado de ti?, bueno multiplícalo por mil y más o menos así estoy.

- Wow, yo- dijo Marinette dudando- supongo que tienes el síndrome del superhéroe.

-¿Cómo? -dijo Adrien sorprendido- ¿Porque dices eso?

- Estaba pensado... en Lady Bug y Chat Noir ...

Marinette supo que había cometido un error al comparar mentalmente su situación con la de Adrián, estaba a punto de revelar su identidad ... ahora que iba a decir.

- Continua- dijo Adrien mirándola fijamente.

- Bueno ... me refiero, o sea como los súper héroes tú tienes mucho que hacer, ellos tienen que salvar el mundo cada vez que ... o sea Hawk Moth me entiendes.

- La verdad no - dijo Adrien - explícame por favor.

Marinette se sonrojo, se había metido en un enorme lío y tenía que salir pronto.

- Bueno es que... Ok no eres un super héroe como, Chat Noir, pero igual que él tienes que balancear las obligaciones que tienes encima. -sonrió Marinette aliviada encontrando al fin una salida - Supongo que los superhéroes tienen una identidad secreta normal, igual que nosotros y tienen que equilibrar todas sus actividades para que nadie note que están haciendo su trabajo, bueno de héroes, entonces tú también tienes que equilibrar el ser el mejor en todas las actividades que haces por tu padre con ser un adolescente normal, eso pienso que debe ser muy difícil... Adrien soy tu amiga y no me gusta verte triste.

- Marinette, definitivamente eres mi mejor amiga, gracias por comprender ... y compararme con Chat Noir.

- Eres muy distinto a Chat Noir, tú tienes que lidiar con todo sin ayuda de un súper poder, creo que eso es más valiente... Ahora dime, tu cara de hoy, ¿acaso volviste a pelear con tu padre?

-Ni siquiera tengo oportunidad, -contesto con una sonrisa triste- está de viaje de nuevo, olvídalo Marinette no tiene importancia.

La última semana Gabriel Agreste había dejado el país dos veces, y por lo general cada vez que se iba Adrien llegaba a la escuela triste y desanimado, Nino le comento a Alya que últimamente padre e hijo habían tenido fuertes peleas.

-Adrien si te sientes solo puedes venir conmigo... y Alya a ... a, comer con nosotras, vamos invitaremos a Nino también y jugaremos videojuegos o algo ...

Adrien estaba conmovido, al menos ahora sabía que Marinette siempre seria Marinette y eso lo reconfortaba.

- Oh no, no por favor, quita esa cara, no estés triste Adrien - dijo ella tocando su brazo- no quiero entrometerme, pero recuerda que no estás solo y se que estás muy ocupado, discúlpame si me excedí. -Marinette se sintió terrible al ver la cara que puso ante la propuesta, y el trato de seguir disculpándose de cualquier manera posible.

Adrien en un impulso abrazo a Marinette fuertemente disfrutando de su calor y cercanía, ese contacto humano del que últimamente se vio tan lejano.

-Marinette te agradezco tu amabilidad -Dijo Adrien - pero no puedo acompañarte, tengo clase de esgrima. Eres mi mejor amiga y siempre sabes cómo hacerme sentir mejor.

-Entonces debes prometerme que si puedo ayudarte en cualquier cosa vas a decirme, en el momento que sea, si soy tu mejor amiga promételo por favor.

-Eres única Marinette, Gracias lo prometo. 

Él volvió a abrazarla, se sentía bien y seguro con el contacto humano, o quiza era ella la que lo hacia sentirse bien. Ella no entendía qué había pasado pero él había abrazado y estaba en las nubes. Adrien le ofreció su brazo y con Marinette flotando entre algodones ambos llegaron hasta el salón de clases.

EL TIEMPO DE LOS HEROESDonde viven las historias. Descúbrelo ahora