Supercorp | Otro mundo

Capítulo 5

—¿Lena? —pregunté sorprendida.

—Sí. Me ha comentado Winn sobre su problema señora Danvers y trabajaremos para que usted vuelva a su Tierra -dijo cortés.

—Puede tutearme... —susurré—. No creo que le guste que yo la tuteé.

—¿Por qué?

Ahora que me acuerdo, la familia de Lena no era malvada, solo envidiosa. Entonces no ha pasado ni lo de Lex ni lo de su madre.

—Nada, simplemente que me llames Kara y tratame normal. No soy una intrusa —dije un poco cortante y nos quedamos en silencio.

—Vale...—dijo al fin—. Cuando menos te lo esperes volverás con tu familia, Kara.

Y luego de esas palabras me colgó. Sentí un poco de vacío con su indiferencia. Me quedé mirando el móvil. Sin aplicaciones, sin mensajes y sin nada. Solo el número de Alex y J'onn, y ahora el de Lena. Pensé en llamar a Álex para pedirle algo de ropa suya, ya que no quería tocar nada de esta Kara, así que teclee y le di a llamar.

—¿Alex? Soy Kara. Necesito que me hagas un favor —dije y ella asintió—. Esta noche cuando vengas a cenar, ¿puedes traerme algo de ropa?

—¿Qué pasa? ¿La de nuestra Kara no te queda bien?

—No, no es eso. Pero no quiero coger nada de ella por Lena... —dije casi musitando.

—Espera se lo voy a preguntar —dijo casi a la par diciendo el nombre de Lena.

—¡No, Alex! ¡Por favor!

—Dice que puedes coger lo que quieras -rió.

—¿En serio? —pregunté asombrada.

—¿No me crees? ¿Quieres que te la pase o que? —dijo con un tono burlón y riéndose otra vez.

—No, no. Está bien. Luego te veo—colgué y suspiré.

Fui a la habitación, me puse a mirar por la cómoda, ya que en el armario solo había cajas, y di con varios conjuntos. Como hacia un poco de frío, me puse un suéter y unos vaqueros para esta noche. Tampoco quise ponerme pijama ni nada por el estilo, no quería montar tanto desorden y dormir desnuda me parecía bien.
En un abrir y cerrar de ojos ya era de noche y tenía muchísima hambre. Y cuando estuve apunto de llamar a Álex, sonó la puerta. Fui caminando en zancadas con una sonrisa en el rostro. Cuando abrí la puerta me esperaba a Álex con dos bolsas en la mano como en la comida, pero no fue así.

—¿Lena? —pregunté sorprendida sin articular una palabra más.

—Alex tenía cosas que hacer... Y Winn me pidió que viniera porque estaba todo el día metida allí sin descanso y aquí estoy... ¿Te pillo ocupada, de improvisto o... decepcionada?—preguntó con lo último con un tono de sarcasmo mientras sonreía de lado y arqueando una ceja.

—No, no. Para nada. Entra —me aparté de la puerta para que entrara y comenzó a caminar hasta la mesa mientras cerraba esta.

—No te he traído chino, pero sí pizza. Espero que no te importe—dijo mientras posaba las cajas en la mesa.

—Espero que sean de queso y barbacoa —dije felizmente mientras me dirigía a la mesa pero vi que Lena fruncía el ceño—. Aunque si son de jamón y queso o carbonara me lo como igual... —dije borrando la sonrisa de mi rostro.

—Lo siento, no me acostumbro a esto. Te pareces en todo a ella —dijo sentándose en la mesa—. También quería pedirte disculpas por cómo me he comportado. No tienes la culpa y...

—Lena—dije sentándome y poniéndome enfrente de ella al interrumpirla—, no te preocupes. Creo que es normal pero créeme que no he venido aquí para fastidiar. De verdad que lo siento, ojalá hubiera ido directamente a mi Tierra y que no tuvieras que pasar por eso.