Te Extraño. -The last airbender- (Zuko Y Tú)

Capítulo 36: De reuniones y otros combustibles. Parte 2.

Dedicada también a sofiashnee24

La decisión de Zuko

Libro 3: Fuego

Con Zuko:

Seguí el consejo de mi primo, y creo que es la mejor decisión que he tomado en mucho tiempo: Seguir mi propio camino y hacer lo correcto.

Tomé mis espadas y acomodé un bolso con lo necesario para poder irme de aquí. Dejé una carta para Mai, dándole las gracias por su amistad.

Al salir y cerrar la puerta detrás de mí, me topé con un miembro de la Guardia Real, a juzgar por sus vestiduras completamente negras, que dejan a la vista solo los ojos; llevaba la cinta roja en el brazo derecho en lugar del izquierdo, así que supuse que es uno de los que se oponen al régimen de mi padre.

-Su excelencia.-dijo, haciendo una reverencia ante mí- Será un honor para mí escoltarlo fuera de aquí.- anunció, manteniendo su posición: apoyando la rodilla izquierda en el suelo, mano izquierda tras la espalda y mano derecha hecha puño sobre el pecho. (cualquier parecido de la posición de las manos, con la de SnK, es pura coincidencia).

-¿Cómo sabe que me iré?- cuestioné con cautela-

-Lleva equipaje y armas, mi Señor.- respondió-

-Cierto. Ponte de pie.- ordené,  y cuando obedeció pude apreciar que se trata de una mujer- Antes de irme, necesito enfrentarme a mi padre- anuncié-

-Es peligroso, excelencia.

-Lo sé.-me puse en marcha, dando por terminada la conversación. No me tomaría mucho tiempo llegar hasta mi padre, pues su recámara no está lejos de la mía.

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Devolví el rayo que mi padre me lanzó apenas terminó el eclipse, incendiando la recámara del Señor del Fuego en el proceso.

-¡Excelencia!-oí que me llamaban- ¡Por aquí!- la Guardia Rebelde me tomó del brazo, sacándome de la recámara en llamas.

Corrimos a lo largo de varios pasillos, esquivando a los Guardias leales a mi padre, hasta que por fin salimos a la luz del día.

-¡Lo conseguiste! El príncipe está a salvo ahora.- dijo un segundo Guardia Rebelde llegando al lado de la que me llevaba.-

-¿El transporte para Su Excelencia está listo?- cuestionó ella llanamente-

-Afirmativo. Nos está esperando.-anunció él-

-Excelencia, mantenga listas sus espadas.-solicitó ella, con un firme tono de voz, mientras sacaba unos sais que al parecer llevaba enfundados tras su espalda; el Guardia a su lado desenfundó un par de dagas que tenía atadas a los muslos.

Llegamos corriendo al arcen donde se guardaban las máquinas de guerra. Frente a uno de los globos de guerra esperaba una tercera Guardia Rebelde, ésta tenía en sus manos una cuchilla con cadena. Una vez frente al globo de guerra, los dos Guardias Rebeldes que me acompañaban hicieron una reverencia apoyados sobre la rodilla izquierda.

-Excelencia.-la tercer Guardia hizo una reverencia como la que ejecutaron sus compañeros- Todo está listo para que parta.- anunció-

-Solo preguntaré una vez: ¿Cómo sabían que partiría?- cuestioné mientras subía al globo de guerra-

-No sabíamos.- respondió la primer Guardia Rebelde- Creíamos que íbamos a tener que ayudarle a escapar, o algo así. -respondió-

-De pie. Los tres.-ordené y obedecieron de inmediato- Gracias.- me incliné en una muestra de respeto típica de la Nación del Fuego que correspondieron con prontitud-

-Que tenga éxito, Excelencia.- dijo el segundo Guardia Rebelde y los tres desaparecieron de un salto-

🔥FIN DEL CAP🐼