DISCLAIMER: Nada me pertenece, solo mi corazón shipper.
Epílogo.
Cinco años habían pasado en un abrir y cerrar de ojos. Arya a sus 23 años y Gendry a sus 28, habían logrado una buena relación, eran el Señor y la Señora de los Storms ends y su gente los amaba. A pesar de su comienzo un poco frío, todos habían aprendido a quererlos cuando vieron lo mucho que hacían por los pequeños. Storms ends era conocido por sus armas, era el único de los Seis reinos que tenían un gran armamento, todo supervisado por su Señor que era el mejor herrero de Westeros, además habían logrado establecer relaciones comerciales con Bravos, todas estas manejadas por su señora. Era sin duda, un Reino que podía ser independiente si lo quisiera, tenían un gran ejército formado por hombres y mujeres por igual y el Señor una vez cada semana invitaba a cenar a un hombre o mujer diferente a su mesa, no importándole su situación social. Todos estaban asombrados por las reformas hechas a este lugar.
Arya estaba en sus cámaras viendo a través de su gran ventana, hoy recibirían a sus hermanos y a su familia. Por primera vez en cuatro años se estaban reuniendo y su corazón no podía contenerse de la felicidad. La última vez que se vieron fue en Winterfell cuando hizo ese viaje con Gendry y Jon, pero solo se había reunido con Sansa, Pod y sus gemelos, ahora en esta ocasión, Bran también venía y su esposa Meera Reed. Ellos habían sorprendido a Westeros cuando anunciaron que estaban casados y esperaban un hijo. Arya ni siquiera pensaba que eso era posible. Pero su hermano parecía feliz según lo dicho por Gendry cada vez que asistía al consejo. Ella no visitaba Desembarco del Rey porque le traía malos recuerdos, además de que siempre debería haber un Baratheon en Storm ends.
Un pequeño llanto proveniente de una cuna a lado de su cama la interrumpió de sus recuerdos.
-¿Qué pasa mi pequeño lobo? ¡Ya es hora de despertar! ¡Tus tíos te van a conocer!
La pequeña sonrió a su madre.
Hace seis lunas, Arya había dado a luz a su segundo hijo, fue una hermosa niña, de cabello rojizo y ojos azules, pero con la pequeña nariz de su padre y Jon. Era una hermosura, no podía creer que ella y Gendry la habían hecho. Sonrió al recordar el momento exacto de su nacimiento:
FLASHBACK:
-No puedo creer que permití que me pusieras otro bebé en el vientre estúpido toro- ella le gritaba a Gendry quien asustado sostenía su mano.
-Calma, mi amor, todo va a estar bien.
-Duele como el infierno. Debería matarte por esto.
-Puedes hacer lo que quieres mylady pero por favor tienes que pujar- Gendry le respondió.
-Usted puede Mi señora- el maestre le dijo.
Afuera de la habitación tenía lugar una tormenta espantosa, con truenos y relámpagos.
-¡Es una niña!- El maestre dijo con alegría mientras Arya respiraba.
Gendry se apresuró a darle un beso en la sien a su mujer mientras el maestre limpiaba al bebé.
-¡Lo hiciste amor!- Te amo- él besó su boca.
-¡Quiero verla!- la loba exigió.
El maestre la limpió y la puso en sus brazos.
Arya abrió los ojos en shock cuando se encontró con su hija por primera vez, en apariencia era una Tully completamente. Por fin los genes que había heredado de su madre se estaban mostrando.

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The final battle.
RomanceHola! Es bueno regresar con una historia de varios capítulos. Daenerys quema Kings Landing, pero he cambiado un poco la forma en que lo hace. Jaime está vivo y Arya y Gendry todavía tienen una oportunidad. TERMINADA