❝ANTIDEPRESIVOS❞ seungpyo

OO6.

—¡Hola!—exclamó Dongpyo al ver a Seungwoo—. Esta vez te hice caso y sí fui a la escuela—dijo haciendo un puchero—. ¿Qué haces?—preguntó el menor.

—Estaba viendo la serie de ayer—dijo señalando el computador—. Bueno, te tengo una pregunta.

—Dime—replicó Dongpyo.

—¿Esta serie es para tu edad?—cuestionó al chico.

—¡Hyung! Obvio es para mi edad, tengo diecinueve, no trece—volvió a hacer un puchero.

—Y yo tengo veintitrés y pienso que los niños chiquitos como tú no deberían de andar viendo estas cosas—respondió el mayor.

—No soy un niño chiquito, soy un niño grande—Dios, Dongpyo se veía tan adorable que Seungwoo comenzó a jugar con sus cachetes.

Dongpyo comenzó a reír, el mayor repitió su acción. Dongpyo se sentía feliz, porque estaba compartiendo su felicidad con Seungwoo.

En ese momento Seungwoo se dio cuenta de algo, que Dongpyo lo hacía muy feliz, que era su medicina hecha persona, que él era su antidepresivo.

Pasaron unos cuantos días más hasta que Seungwoo salió del hospital, su psicóloga y psiquiatra lo veían mucho más alegre y eso significaba que el hecho de estar en el hospital había funcionado. Bueno, no era eso realmente, era más bien que Seungwoo estuviera con Dongpyo todos los días, lo que le había hecho sentirse mejor, pero ésto ni su psicóloga, ni su psiquiatra lo sabían, era algo entre él y Dongpyo.

—Seungwoo hyung, ¿hoy sí podremos ir a comer un helado como habíamos dicho la última vez?—preguntó Dongpyo a través de su celular.

—Claro, esta vez te aseguro que iré—respondió Seungwoo.

—¡Yay! Asegúrate de llegar temprano, no me gusta esperar—advirtió Dongpyo.

—Trataré de buscarte lo más temprano posible, ¿está bien?—dijo el mayor.

—Sipi dipi—contestó Dongpyo—. Bueno, mejor ya cortamos la llamada porque así tengo que esperar menos, nos vemos hyung.

—Nos vemos, Dongpyo—se despidió, Seungwoo, antes de cortar.