Capítulo Nueve.

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Estaba aún un poco aturdida por la información que me dió mi hermano, me senté en la cama y ví mis manos, ahora mi mamá es Vampiro, solté un suspiro y agarré mi móvil para llamar a las chicas. Le marqué a Say sabiendo que donde ella también estarían Erika y Tani; al tercer timbre me contestó.

-Halo?- fruncí el ceño ¿Tani contesto el móvil?.

-Tania?.

-Jess! Qué paso fea?- reí, definitivamente era Tania.

-En el paraíso dentro de 10- escuché como soltó un chillido como afirmación y colgué, a ella le encantaba ir a ese antro, cuyo nombre tenía mal, ya que aveces parecía más un infierno que un paraíso.

Después de unos minutos de estar lista salí de mi casa y camine al antro, después de otros minutos más llegue, viendo a mis amigas fuera del lugar y esperándome, enteramos todas juntas y comenzamos a beber un poco, yo me levanté de donde estaba sentada y fui a la pista de baile, donde comencé a mover mis caderas con el ritmo de la canción; siento como unas manos toman mis caderas y río, pensando que es una de las chicas, cuando me doy cuenta ví que no era ninguna de ellas.

-¡Sueltame!- hablé enojada mientras quitaba las asquerosas manos de Harry de mi cintura.

-Hola Hermosa- sonrió, yo hice una mueca.

-No me llames así estúpido- el se hizo el ofendido pero después soltó una risa.

-Sabes, las zorras si me causan gracia- después de decir eso se fue riendo mientras yo sentía el enojo correr por mi venas, me acerque a las chicas despidiendome de ellas y saliendo de ese lugar. Maldito Harry. Caminé rápido mientras sentía unos pasos detrás mío.

-¿Porque vas con tanta prisa?- no tenía que darme la vuelta para saber el dueño de esa voz, trate de calmarme un poco y me di la vuelta.

-Solo no quiero respirar el aire de ese
lugar con estúpidos cerca- ví como Randy hizo una mueca y caí en cuenta que seguro el se estaba tomando en cuenta- tú no vas entre esos- hablé rápido mientras movía mis manos, el sonrio un poco y se puso a mi lado.

-Esta bien, te creo- yo sonreí tranquila y el me devolvió el gesto.

-¿A donde ibas?.

-No se- me encogí de hombros- a algún lugar que sea tranquilo- el sonrió más y pasó un brazo por mis hombros.

-Yo conozco un lugar.

*-*

No podía creer en el lugar que estaba, literalmente estaba arriba de un montaña donde tenía un paisaje hermoso y que se veía mucho más maravilloso con el atardecer bajando, podía escuchar como cada insecto hacía su ruido, volviendo el lugar más tranquilo. Yo sonreí y volví a ver a Randy, quién estaba sentado a la par mía.

-Ese lugar es hermoso- el sonrió.

-Me alegra que te gustará- yo sonreí más y apoye mi cabeza en el hombro de Randy, viendo como el sol se ocultó totalmente dándole el paso a la luna. Definitivamente este lugar era demasiado tranquilo, y sentía más paz en mi interior con Randy a mi lado.

La Leyenda de los Vampiros ®Donde viven las historias. Descúbrelo ahora