19-Totalmente indecisa

17 0 0
                                    

Me había quedado muda y sin aliento. ¿Me lo estaba preguntando en serio?

- ¿P-pero por qué me lo preguntas ahora?

-Pues...porque antes no tenía suficiente valor para hacerlo.

-Pero ahora yo no puedo- me llevé las manos a la cabeza, me estaba desesperando-¡no puedo!

-¿Por qué?-preguntó con decepción en sus ojos.

-Porque estoy saliendo con alguien.-respondí mirando al suelo, a mis zapatos, a lo que no fuera él y sus ojos.

De repente todo quedó en un terrible silencio. Por fin me atreví a levantar la vista, pero enseguida me arrepentí de haberlo hecho cuando vi su expresión; decepcionada, desgarrada, mortificada, pero de algún modo lo hacía lucir increíblemente más guapo y no vulnerable como cabía esperar. Cabizbaja abandoné el laberinto de setos sabiendo que de alguna manera le había fallado. ¿Pero, cómo sabes quien es el chico correcto? ¿cómo decir sí o no? ¿cómo es que soy un completo desastre en mi vida y en esta mierda sentimental? Ni idea, quizá sea talento natural, como el de decepcionar a las personas. Vuelvo al interior dónde el ambiente se ha relajado; la estancia está bañada en una luz rosa pastelosa y suave, y yo estoy que reviento. ¿No se supone que quiero a Austin? ¿ Le debo llamar novio oficialmente?¿De verdad siento lo que sentía antes por él? ¿Es algo pasajero? ¿deberíamos dejar de lado lo poco que tenemos y conservar intacta la amistad? Mierda mierda y más mierda. Ahora mismo todo en mi cabeza son preguntas. Me siento tan derrotada que no me importa rogarle a mi hermano que me lleve. Pero no me querrá llevar ya que se lo está pasando en grande y yo tampoco quiero pedirle que pare por mí. Quiero que al menos uno de los dos se lo pase bien, porque para mí la fiesta se ha vuelto... aburrida. Sé que como muchas adolescentes tendría que estar al menos fingiendo que mis problemas son mínimos y no me importan demasiado, que baile y que ría y finja que me lo estoy pasando bien y que todo me importa un pepino y encontrar las palabras adecuadas para todo ,pero como siempre, voy al revés del mundo e ir a contracorriente me agota.

No puedo decidirme y para cuando lo haga todo se habrá ido al carajo, todos se habrán cansado de mí y mis quebraderos de cabeza.
"Tuyos y míos ,eh"

Vaya, mira quien aparece ahora, mi desorden mental favorito.
" Ejem cof cof, idiota, cof cof"

los desórdenes mentales no tenéis tos, ¿sabes?

"¿y quién ha dicho que yo sea un maldito desorden mental, pirada?"

Ah, ehmm pues... yo misma.

"Me largo; eres más insufrible que yo"

¡pero si tú eres yo!
"Lo que yo decía... en fin; ¡chau!"

Ahá.

Ya no sé con quién estar, qué hacer o dónde ir porque ya ni sé que está bien o mal, si preguntara, unos dirían que debería estar con Austin y otros dirían que debería estar con Alack. Y yo... yo... yo soy tan idiota torpe y absurda que ni siquiera puedo saber que pienso yo misma de todo esto por miedo a hacerme caso.

Me voy dispuesta a sentarme dispuesta a pasar el resto de la velada ahí quieta, pero me paro en seco cuando noto que alguien me ha rodeado el antebrazo y me atrae hacia él.

-Ah. Hola de nuevo Alack. Cuánto tiempo.-Pongo los ojos en blanco. Necesito aclararme. Y pronto.

-Solo han sido cinco minutos.-sonríe y me suelta el brazo.-pero aún así yo también te he echado de menos ¿sabes?-

Le devuelvo la expresión y me río negando con la cabeza.

-No tienes remedio.-amplio mi sonrisa.

My favourite roseDonde viven las historias. Descúbrelo ahora