Bed Friends | SaTzu (traducción)

Capitulo 4

"Yah! Sana!" Nayeon dijo mientras perseguía a Sana. La torpe chica le tiró accidentalmente agua a Nayeon, haciendo que esta quede toda empapada.

"Juro que si pongo mis manos en ti estarás muerta." La mayor amenazó, empezando a cansarse de andar corriendo.

"Lo siento, ok?! No fue mi intención!" Dijo Sana con su voz aguda.

Nayeon se detuvo tratando de recuperar el aliento, pues ya estaba exhausta. Por otro lado, Sana aún podía correr millas y millas.

"Nayeon, estás vieja." Dijo Jeongyeon dándole palmadas a la espalda de Nayeon, ganándose una mirada amenazante.

La mayor, habiendo recuperado el aliento y la energía, continuó persiguiendo a Sana hasta que las dos estuvieron muy agotadas para moverse.

"Estoy exhausta." Dijo Sana mientras se tumbaba en el sofá, limpiando el sudor de su cara.

"Es tu culpa, ardilla." Dijo Nayeon, jadeando por aire junto a Sana.

"Ash, esta niña y esta viejita, en serio." Dijo Mina mientras reía bajo.

"Oigan, ya es tarde. Vayamos a casa." Dijo Jeongyeon, mirando hacia afuera. Ya eran las 9 y estaban todas cansadas por las actividades de más temprano.

"Me quedaré un rato más, estoy muy cansada." Dijo Sana, obteniendo como respuesta que las 3 chicas que ahora se retiraban asintieran.

"Iré a buscarte agua." Tzuyu fue a la cocina por el agua para la cansada ardilla.

"Aquí está tu agu-aish, en serio?" Cuando Tzuyu volvió Sana ya estaba dormida. Suspiró antes de llamar e informar a las ardillas padres que Sana no iría a casa esta noche.

La menor cargó a Sana hasta la habitación, al estilo de recién casados. Dejando a la ardilla durmiente arropada en la cama, se puso de pie, lista para retirarse cuando una mano la jaló de vuelta a la cama.

"Duerme conmigo, por favor..." Sana pidió adorablemente, soñolienta. Tzuyu suspiró antes de aceptar. Se acostó junto a Sana y la mayor inmediatamente rodeó la cintura de la menor con sus brazos. "Buenas noches."

'Tzuyu, lo juro. Si pierdes el autocontrol, te mudas a Hawaii.' Tzuyu trataba lo más que podía de sacar a Sana de su mente. La mayor ya estaba profundamente dormida, haciendo a Tzuyu pensar que estaría bien hacer algo.

Pero no. Aún estaba en su sano juicio y podía controlar a la bestia que luchaba por salir de su jaula.

Tzuyu suspiró, sabiendo que sería una larga noche para ella.

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Los rayos de sol despertaron a Tzuyu de su sueño profundo. Estiró sus brazos y notó que la ardilla no se encontraba por ninguna parte.

"¿Me ha dejado?" Tzuyu se preguntó, haciendo un puchero al pensar en su mejor amiga dejándola sin su consentimiento.

Se encogió de hombros, quitándose la idea de la cabeza e hizo sus rutinas diarias antes de dirigirse a la cocina. El olor de algo delicioso le llegó.

Vio a Sana cocinando su platillo favorito, panqueques de chocolate. Y sin mencionar, que Sana se veía muy sexy con los shorts y camisa extra grande de Tzuyu.

'Supongo que le gusta usar mi ropa'. Tzuyu pensó, sonriendo malvadamente.

"Y aquí vienen de nuevo mis hormonas." La más alta murmuró para sí misma.

"Por qué siempre te ves tan sexy? Me lo haces tan difícil."

Sin embargo, Tzuyu igual se acercó a Sana para informarle de su presencia. Abrazó a Sana por la espalda, haciéndola sobresaltarse.

"Oh, estás despierta. Buenos días, Tzuyu-ah." Sana dijo con su voz ronca de recién levantada, para nada ayudando a la más joven.

"Buenos días..." respondió esta mientras mordía su labio.

'Habrán pastillas para controlar las hormonas? Porque necesito una ahora mismo.' Tzuyu pensó.

"Podrías poner la mesa?" Preguntó Sana, recibiendo un débil 'claro' como respuesta.

Ambas se sentaron cuando la comida estuvo lista. Comieron tranquilamente, sin siquiera molestarse en mirar a la otra.

Tzuyu decidió que no haría daño echar un pequeño vistazo. Se arrepintió inmediatamente de haber mirado a Sana.

'Qué mierda?! Sana no está usando sostén!' Tzuyu entró en pánico. 'Oh Señor, ayúdame y perdóname.' Tzuyu rezó por la seguridad de Sana, porque estaba al borde de perder el control.

'Ugh, eres tan sexy.' Tzuyu pensó, pero Sana pudo escucharlo.

"Lo soy?" Sana preguntó con una sonrisa en su cara, haciendo a Tzuyu tragar saliva inmediatamente. La mayor se levantó, lista para sentarse en el regazo de Tzuyu mientras se mordía el labio. La más alta se calentó aún más que antes. Sana se sentó y empezó a frotarse contra Tzuyu. La mayor soltó un gemido.

"Oh, Tzuyu..."

"Tzuyu."

"¡Tzuyu!" La mencionada esfumó sus pensamientos y miró a Sana con una cara sonrojada. "Estás bien?"

"A-ah, s-sí..." Dijo Tzuyu tartamudeando.

"Como decía, A qué hora vas a llevarme a casa?" Preguntó Sana con su tierna voz, haciendo que el corazón de la menor se derritiera.

"P-podemos ir cuando terminemos de comer."

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