La bolsa de los vestidos me toco cargarlo a mi, era lo mínimo por unos vestidos. Llegamos al estacionamiento y buscamos el auto, mi mamá se sentó en el asiento del piloto y yo del copiloto.
-¿Tienes hambre?-Pregunto encendiendo el auto.
-Mmm... Si, no he comido nada.
-Conozco un lugar excelente ¿deseas ir o ordenamos en casa?
Era extraño que mi mamá pregunte por la comida, mayormente nuestras conversaciones trataban de desayunos y llegar a tiempo al institiuto.
Así que decidí pasar un tiempo con ella.
-Claro.
-Bien, ponte el cinturón.-Me dijo encendiendo el auto.
En todo el momento las dos permanecimos calladas, no sabia que decirle, mayormente me contaba lo frustrante que era su trabajo yo por mi parte hacia mi papel de hija, sacaba buenas notas, soy responsable, ordenada y amable.
Veía las calles desoladas, la ciudad no era muy poblada que digamos, era como la ciudadela perfecta, excepto por los vagabundos y delincuentes cosa que la llevaban a la imperfección.
Sentí que el auto ya no avanzaba, mire el celular y eran las 8:27 pm. La luz del letrero del lugar no funcionaba, solo brillaba la letra "R" pero adentro se podía observar que había mucha gente.
-¿Que es?-Le pregunte a mamá.
-Vine una vez después del trabajo.
Entramos nos quedamos en la puerta y me fije en las mesas, solo habían 3 libres y 2 de ellas estaban sucias.
Una chica con cabello rojizo enmarañando se nos acerco.
-Buenas noches, bienvenidas a "Marrueco's" ¿desean una mesa?-Dijo la chica con voz de un ángel.
-Si por favor, una mesa para dos.-Respondió mi mamá.
-Esta bien, siganme por favor.-Nos indico la chica, era muy bonita llevaba un delantal del lugar.
Seguimos a la señorita y nos llevo a la única mesa limpia, el nombre del lugar me parecía haberlo escuchado... En cualquier momento me lo acordare.
Tomamos asiento mi madre enfrente mío y las bolsas encima de la banqueta a mi lado.
La misma señorita se nos acerco y nos dijo.
-En un momento uno de mis compañeros se les va a acercar a tomarle el pedido, cualquier duda mi nombre es Gisela, un gusto.-La chica se fue dejándonos con dos cartas de menú en las manos.
No quería escoger lo más caro, bastaba hacerle gastar a mi mamá con un vestido más. En fin, yo quería algo ligero.
Habían pastas, lasaña, pizza, tacos, burritos, comida china, etc. Preferiría lasaña y una lata de Coca-Cola.
-¿Ya sabes lo que vas a pedir?-Pregunta mi madre dirigiendo la mirada hacia mi.
-Mmm... creo que si.
Entonces en ese momento se nos acerca un chico tomando una libreta con un bolígrafo, noto que viste con una gorra negra con nombre del lugar, un polo rojo y el delantal del lugar.
-Buenas noches, bienvenido a Marrueco's.-Oi que dijo con pocas ganas.-Mi nombre es Arthur y vengo a tomarles su orden.
Había olvidado que el trabajaba aquí.
Oh maldición.
Sus ojos verdes estaban mirando los míos y yo los de él. Había un tipo de conexión totalmente extraña, más extraña de la que había ocurrido hoy en la mañana.
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¿Del odio al amor un paso?
Teen FictionEllos no creían en el amor, hasta que se atrajeron entre si. Él era rudo muy distinto a ella, ella era suave muy distinto a él. Se odiaban ¿el destino puede cambiar los sentientos?¿el destino puede cambiar a las personas?¿el amor puede cambiar su hi...