Solo Tú Y Yo》Carl Grimes

Idiot

No cualquiera tiene mi valentía, todo el mundo le tiene miedo a una adolescente y tú no serás la excepción....

Carl caminaba contigo a su lado, él mantenía su mano en tu muñeca, habían escapado de un horda muy grande de Caminantes, por lo que los dos estaban cansados, llenos de sangre y con rasguños y golpes. Los dos estaban perdidos por lo que caminaban sin rumbo alguno, decides dejar de caminar, tus piernas no respondían y tú respiración no era para nada normal, cierras las ojos con fuerza y dejas caer tu cuerpo al piso.

Carl con preocupación camina como puede hacia ti y se pone de cuclillas, de su mochila saca una botella de agua la cual era la única que le quedaba, pero eso no le importaba ahora.

—No puedo seguir...— dices débilmente, Carl solo acaricia tu mejilla y te entrega la botella, la tomas hasta la mitad y se la entregas a Carl quien empieza a beber lo que quedo.

—No debemos estar muy lejos— murmura para si mismo levantándose, miras tu tobillo el cual tenía un morete y éste no te dejaba caminar. Carl te ayuda a levantarte lo cual fue una mierda por el tobillo lastimado, de todos modos seguiste caminando.

Llegaron a un granero, los recuerdos de Hershel y Beth se hacen presentes en la mente de los dos, cuando Shane mató a Otis, cuando se dieron cuenta de los caminantes en el granero, la muerte de Sophia. Miras a Carl y este solo te abraza.

—Podemos pasar la noche aquí...— asientes y los dos entran, en ella se encontraba tres caminantes, fueron eliminados de manera rápida, por lo que los dos decidieron hacer una cama improvisada, Carl cerró las puertas por si alguna horda llegaba y luego se fueron a acostar en el piso con paja.

Miras a Carl quien se mantenía mirando el techo, sueltas un suspiro y te das la vuelta abrazandolo, el al ver lo que hacías, pone su brazo en tu cintura y besa tu cabeza.

—Solo fue un mal día...— dice con una sonrisa —Mañana iremos a casa— asientes y los dos se quedan profundamente dormidos.

Carl despierta por un estruendoso ruido, cuando se voltea se da cuenta de que su novia no estaba con él por lo que se alarmó, Carl se levanta y te empieza a buscar, al no encontrarte sus nervios aumentaron. Salió del granero y se dio cuenta de que aún seguía siendo de noche, miró a lo lejos un coche que le llamó por completo la atención. Pero luego no pudo ver nada más, le habían puesto una venda en sus ojos ,impidiendo que mirara a su alrededor. Empezó a forsajear pero sus manos fueron atadas con una soga resistente, luego sintió como lo arrojaron a un lugar.

—¡Carl!— la voz femenina de su novia hace que de inmediato se sentara en el lugar, siente sus cálidas manos desatando la soga y la venda que traía en sus ojos, al verla no pudo contenerse y le importaba poco si su hermano estaba ahí, la abrazó con fuerza y le dio un corto beso en sus labios.

—Les pediria una explicación pero no es el momento...— la voz gruesa de Daryl hace que los dos se separen, Carl mira a su alrededor y pudo visualizar a Glenn, Michonne, Daryl y Rosita.

Luego de largas horas de viaje, la camioneta se detiene pero la puerta no abría. Miraste a Carl preocupada pero éste solo te abrazaba y miraba a su alrededor con seriedad. Pasaron los minutos y las voces de afuera te tensaban un poco.

—¡arrodíllense!— el grito de un hombre hace que tu atención se quede en lo que pasaba afuera —Ahora falta los extras— su risa ronca hace que te estremescas, las puertas se abren dejando que la luz de los autos los iluminaran. Sacan a uno por uno, dejándote a la par de Glenn y Daryl —Bien... el salón está repleto... ahora falta el anfitrión— toca la puerta de la caravana la cual hasta ahora notas que estaba enfrente de ustedes. De ahí sale un hombre con chaqueta de cuero negra, no te interesó mucho sobre su aspecto (El cual era increíblemente guapo :v) lo que te llamó más la atención fue el bate de béisbol que traía recostado en su hombro, tenía enrollado alambres con púas y en tu mente paso muchas cosas no muy bonitas con eso.