Quiet (TAENY)

III.

En cuanto regresé a mi departamento, el recuerdo de Tiffany seguía acosandome como un fantasma, un dulce y sensual fantasma. No hacía otra cosas más que intentar descifrar a que se refería Hyoyeon, ¿Acaso no era la primera en caer en las redes de Tiffany? ¿Cuidado con que debia tener? Era una madeja de preguntas que aún no podía desenredar.

Me serví un té caliente y prendí mi computador, tenía que planificar unas cuantas clases más y enviar mi currículum. Pero como buena "millennial", lo primero que abrí fue mi facebook.

No solía tener notificaciones en facebook, es más, rara vez lo usaba. Es más que nada una costumbre eso de abrirlo y ver unos cuánto videos y memes. Pero me sorprendí al ver una notificación.

Era una solicitud de amistad de Seohyun.

Reí un poco hacia mis adentros, porque parece que esa chica no tenía muchos filtros en su conducta, pero me parece tierna. Aunque por obvias razones, ignoré su solicitud y volví a concentrarme en el trabajo. Estas planificaciones no iban a hacerse solas.

¿Y si Seohyun tenía A Tiffany en su facebook?

Negué rápidamente con mi cabeza, ya me estaba asustando un poco mi obsesión con esa chica, así que intenté concentrarme aún más en el trabajo. Puse un poco de música, me tomé otro té, busque guías y guías de más ejercicios, pero Tiffany no salía de mi cabeza. No dejaba de fantasear con ella, quería verla, quería saber que hacía con su vida fuera de la escuela, si tenía amigos, si hacía alguna actividad extracurricular, si tenía novio... Revise rápidamente el perfil de Seohyun, reafirmando lo torpe y divertida que era, pero me concentré en revisar sus amigos, tenía cerca de mil, así que giré mis ojos, intentando convencerme que era una tonta oír hacer esto, de que no debía gastar mi timwepo en stalkear a una alumna, pero el deseo de descifrar a la misteriosa Tiffany me consumía. Escribí su nombre en la barra, creyendo que sería la única Tiffany del mundo, pero no, 50 Tiffany. Mierda.

Intenté escribir su apellido, pero nada. ¡Por supuesto que la misteriosa Tiffany no aparecería en ningún sitio! Maldije unos segundos en mi cabeza, repitiendome una y otra vez que era una estúpida, que ya eran las 10 de la noche y las malditas guías y planificaciones no iban a hacerse solas, que había perdido mi tiempo buscando y buscando a esa chica misteriosa, que simplemente no quería ser encontrada por nadie en el mundo.

                           °  °  °  °

A la mañana siguiente, intenté abrir las ojos la primera vez que sono la alarma. Pero mi cuerpo no me dejaba moverme. La retresé 15 minutos, llegando a soñar que me dio la energía necesaria para levantarme finalmente de la cama. Me duché, vestí y nuevamente me serví un té, casi siempre tomaba desayuno de pie en la cocina, así que en 30 minutos ya estaba saliendo de la casa.

Llegué a la escuela, revisando mi horario una y otra vez, tratando de apresurar el paso hacia el salón. Hoy vería a primera hora a Tiffany. Y no podía evitar sentirme feliz, y nerviosa al mismo tiempo. El timbre sonó al mismo tiempo, que yo cruzaba el umbral de la puerta.
- Buenos días- salude mientras dirigía hacia mí escritorio para luego mirar a mis alumnas que se encontraban de pie listas para saludarme de vuelta.
- Buenos días Profesora- dijeron al unísono, mientras les hacía una pequeña mueca para que tomarán asiento nuevamente y poder buscar a Tiffany con la mirada.

Y ahí estaba ella. Con su mirada fija en mi.

Sonreí hacia mis adentros, no se porque, pero me encantaba que es chica me observará de esa manera, me gustaba ser su objeto de admiración, me gustaba imaginar que yo también la atraía o le llamaba la antecion como ella a mí.