Capítulo 6

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El rayo de sol nunca llegó, no se porque pero no lo hizo, lo único que vi fue oscuridad, mucha de hecho, por un momento pensé que seguía en mi cama,  en mi habitación, pero no, me mente ya vagaba por otro lugar y no solo mi mente toda yo estaba en un lugar desolado, un lugar lleno de pensamientos horribles, en donde me empezaron a llegar recuerdos de Stela, horribles recuerdos, también de Tomás, todos son recuerdos  deprimentes de mi vida, donde todo duele, donde mi existencia me causaba dolor, donde la culpa me ahoga, donde el simple hecho de respirar me duele, donde ya ni siquiera quiero existir.

De repente empecé a llorar, no solo a llorar comencé a gritar no aguantaba el dolor, la muerte de Stella me dolió diez veces más en ese momento, no se si es un sueño pero se siente muy real demasiado.

En medio de mi dolor escucho una voz, alguien me habla.

— Este es mi mundo, el mundo del dolor, pues soy el dios del dolor, Deimos.

No puedo creer que el me este haciendo eso.

—¡¡Me duele!!— grito—¡¡Me duele mucho!!

— ¡Esto es lo que tienes que aguantar para estar junto a mi!.

En la distancia puedo escuchar la voz de alguien más, cada vez se aclara.

—Alsemor por favor despierta.

Abro los ojos lentamente mientras me voy calmando, mi mente vaga en el últimos segundos, veo a Metus muy cerca de mi y no oculto el impulso de cubrirme  hasta el cuello, el esboza una sonrisa, pero después se aleja lo que hace que suelte un suspiro.

— No te asustes— dice— vengo a explicar lo que pasó hoy— Supongo que también lo que pasó en mi sueño.

—¿Por qué me has hecho sentir eso?—pregunto un poco enfadada, no puedo creer que me haya hecho eso.

—¿Que? ¿De que hablas?—no puedo confiar en el.

—Si querías que te entendiera podrías solo decirme ¿Que haces en mi casa, en mi habitación?— digo, tratando de no recordar lo que pasó hace unos minutos.

— Como te dije vine a explicar lo que pasa— no creo que quiere explicar, lo único que quiere es hacerme sufrir.

— ¿Que? Me vienes a decir que tienes poderes sobrenaturales, que estamos destinados a estar juntos pero que no podemos porque hay alguna fuerza sobrenatural muy malvada que nos impide poder disfrutar de nuestro amor?, o ¿me dirás qué estás maldito y la manera de acabar con tu maldición es sacrificandome? a lo mejor eres mi ángel guardián pero te enamoraste de mi así que los arcángeles te están obligando  a que te alejes de mi pero como me amas tanto no puedes hacerlo— saque todo lo que quería decirle—No me importa lo que quieras decirme, no se porque estás aquí, ni se lo que pasa, y no quiero estar involucrada.

—Debes tranquilizarte para poder explicar, y te aseguro que lo que menos quiero es que estés involucrada.

—¿Sabes qué? No me gustas  así que ve alejándote y no quiero a un ser capaz de hacerme sufrir muy Cerca.

—No te haré daño lo prometo, de verdad eso es lo que menos quiero hacer.

—Si si claro, es muy fácil decirlo pero a veces no sabemos cuándo lastimamos a alguien y no  quiero complicaciones en mi vida ya he tenido demasiado, no necesito un... ¿Que eres, vampiro, Nephilim, angel caído, zombie, hombre lobo o que?

— Un ser humano con mucha mala suerte, nací siendo humano, siento como un humano,  hago todo lo que hace un humano, una de mis virtudes más humana es que siento dolor a un grado mayor pero lo siento, se que lo has tenido difícil y trato de alejarme.

— No no sabes lo que he pasado y si realmente te quisieras alejar no estarías en mi habitación observándome mientras duermo— en ese instante mi mente viaja a ese momento en el que tuve que volver a vivir lo que pasó con mis dos mejores amigos.

—Perdón por hacer que te acuerdes de cosas que prefieres olvidar— eso enciende mi curiosidad ¿Como sabe?

—¿Como sabes de eso?

—Se mucho más de ti de lo que crees, se todo lo que tuviste que sufrir, se todo lo que te pasó después de aquella tragedia y te puedo asegurar que se a que grado te dolió.

— No, no sabes, no sabes nada de mi, ni de cuento me dolió —le digo mientras empiezan a caer lágrimas—No te creas como los demás que creen saber cómo me siento porque tú, no lo sabes.

—Lo siento, los dolores y las penas no se pueden estar comparando, tu dolor es tu dolor y solo tú sabes hasta que grado te duele...

Sentía como el sueño me llamaba y yo cedía a el.

Pensé que dormiría pero desperté en ese cementerio, el que había despertado la primera vez con Miles, ni siquiera llegue a escuchar completamente lo que me quiso decir, ni siquiera se si se fue de casa, quiero despertar pero no puedo.

Este es un sueño pesado, siento en cada paso como mi cuerpo pesa cada vez más .
Veo en la distancia que algo se mueve.

Hay un chico pero este se queda en la distancia, solo me observa, de repente comienza a llorar.    

Siento pena por él, trato de acercarme para saber que es lo que le pasa.

—¿Por qué lloras?— le pregunto acercándome.

—Solo quiero verte feliz y acabar con todo esto, quiero que esto termine, solo quiero paz, eso es lo  único que pido pero se que eso no es lo que recibiré.

Sus hombros tiemblan, luego se escuchan sus sollozos levanta la cabeza y me mira desde la distancia, lleva capucha y no logro verle el rostro, pero aún así  exclama:

—¡No quiero que termines aquí, no quiero que termines como ella, te amo demasiado como para hacerlo!

Y despierto.

Estoy 99% segura de que eso no fue un sueño.

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