Capítulo 22

53.9K 3.6K 450
                                    

Lía:

Ethan, mi Ethan. Mi hombre fuerte y grande, mi amor.

Me acaricia el pelo con suavidad como si estuviera tocando algo muy fragil y valioso y yo vuelvo a sentirme segura. Vuelvo a sentirme en casa.

Ethan:
Lia me lleva hacia lo que supongo que será el cuarto en donde vive. ¿Que carajos hace mi chica en este lugar de mala muerte?

Entramos a una habitacion vieja y sucia, paredes despintadas y techo con manchas de humedad.

Reacio, me siento en la horrenda cama y Lía se sienta en mi regazo, aún llorando y con su cabeza apollda en mi pecho.

-Lía, mi amor. Tienes que explicarme que es lo que sucedió aquel día, cielo mío. ¿Cómo es que estás aquí y no volviste con nosotros?

Tiene que decirme qué narices sucedió antes de que me vuelva loco!

-Ethan, me secuestraron - Comienza a explicar y un horrendo frio me recorre el cuerpo -Cuando ustedes se fueron, uno de los hombres de Navarro, Mario, me encontró. Mi pulso era casi imperceptible pero ahí estaba - Le acaricio el pelo dándole animos-Me llevaron con ellos. ¿Recuerdas que me contaste que Navarro era dueño de u-na de las redes de Tra-trata más importantes ? - Termina eso último ahogada en llanto.

El hielo recorre mis venas. Nonononono, eso no por favor.

-Me metieron al negocio de trata de blancas, cariño.

Mi mundo se desmorona. Todo es mi culpa, mi maldita culpa. ¿Como no me di cuenta de que mi mujer aún vivia?¿Como dejé que esto le ocurruera a mi Lía?¿Como dejé que sucediera?

-Me mantuvieron cautiva durante estos cinco cochinos años, Ethan- Se acurruca contra mí más todavía y yo aprieto mi agarre -Me abusaron, Ethan.. Me.. Prostituyeron.

-Los encontraré, cariño. ¡Los haré pagar por lo que nos hicieron! - Grito impotente - Te lo prometo. Pagarán con dolor cada una de tus lagrimas, nena. Los mataré.

-Nos mantenían drogadas para que no intentaramos escapar ni pongamos resistencia - Prosigue explicando -Pero yo encontré la oportunidad de escapar durante una de las fiestas privadas. Uno de los vigilantes estaba demasiado ocupado abusando de una chica. Ethan todas esas mujeres..

-Tranquila, tesoro. No volverás allí, me vengaré de ellos, te lo juro. Destruiremos su sucio negocio. Pagarán.

-Sólo quiero ir a casa, Cariño - Susurra -Llevame a casa.

Sin necesidad de que lo repita dos veces la cargo en brazos, pago la cuenta del motel y me la llevo de esta maldita ciudad del demonio. El yet aún nos espera en el aeropuerto y volvemos a casa.

-Ethan, nuestra hija...

-Es maravillosa, Lía. - Le digo mientras la abrazo en el cómodo asiento del yet. -Es preciosa cómo tú. Igualita. Tus mismos hermosos ojos, la misma sonrisa, su naricita de botón cómo la tuya.

-¡Ay, Ethan! -Sonríe radiante -¿Cómo es ella, cariño?

-Es una niña muy coqueta. La princesa de la casa - Sonrío pensando en nuestra pequeñita - muy minada y algo caprichosa, papi la malcria un poco.

-Me imagino que lo haces - Contesta con una risita que de pronto muere, reemplazada por una cara de preocupacion -Ethan, crees que ella..¿Me querrá cómo su madre?

-Cariño por supuesto que te querrá. Eres su madre, eres preciosa, cariñosa, graciosa, eres perfecta -Le asrguro mirandola a los ojos para que no quepa duda -Lilly te amará, cielo. Tanto como su papi.

Mía por Completo /Siéntete Mía 2#Donde viven las historias. Descúbrelo ahora