【ｓｅñｏｒｉｔａ】 minv

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Yoongi estará narrando en esta historia, así que atentos.

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–Nammie, podrías por favor venir rápido. Hoseok y Seokjin han llegado ya, tengo miedo– me moví de un lado a otro por toda la habitación, hace más de media hora que habían llegado y yo no iba a aguantar estar más tiempo sola. No me gustaban, nunca lo hicieron. Incluso si jamás me tocaron, sus miradas de odio y desesperación por qué no podían hacerlo, era horrible.

–sabes que no estoy cerca de ahí, por favor espera un rato más y no les dirijas la palabra, no salgas de la habitación si no es necesario– le escuché hablar al otro lado de la línea, me estaba comenzando a quedar sin aire y a Namjoon no parecía importarle mucho, pero sé que no es así, si le importo, solo que no suele ser muy expresivo con estas cosas, él no se altera con estas cosas. Solo existe paz y tranquilidad en su persona, nada más que eso y, sabe manejar bien las situaciones como estas, no por nada es la cabeza de todo este lugar, no por nada estoy enamorada de él.

–esta bien, no voy a salir– suspiré, pude darme cuenta fácilmente que Namjoon estaba agotado, no tengo idea de a dónde fue ni que hizo, pero lo que sea que haya hecho, lo agotó. Y aun si hablamos por llamada yo me doy cuenta así que solo me despido y cuelgo, alcanzó a oír un te quiero de su parte y eso es suficiente para calmarme. Él me quiere y es por eso que sigo aquí, viva. Gracias a él puedo ser quien quiero ser y gracias a él, no tengo que trabajar igual que las demás personas aquí dentro, el único problema son sus celos y, es por ello que jamás he salido de aquí si no es en su compañía. Eso está bien para mi. No me gusta salir, prefiero mil veces permanecer dentro de esta casa y ayudar dentro de lo que cabe a las demás personas que de verdad lo necesitan, claro, cuando esos dos no están presentes. Yo jamás les he dado la cara, siempre se burlan de mi y me dice muchas cosas hirientes respecto a mi físico y a lo que me considero, Namjoon les grita cuando lo hacen frente a él y rebaja su paga, pero cuando él no está, ellos se aprovechan por qué saben que yo no diré nada por evitar problemas mayores. Creo que puedo decir con mucha certeza que gracias a mi, ellos están vivos aún.

–¡Yoongi, ven aquí ahora mismo!– es Seokjin. Odio que me llame así, pero desde que llegué aquí, no lo he hecho cambiar a como debe de referirse a mi persona. No sé que necesita, pero Namjoon me dijo que no saliera si no era necesario. Escucho la puerta ser golpeada de pronto, voy a tener que salir. Veo el pomo moverse con rapidez, le he puesto candado así que si no quiero salir ellos no pueden hacer nada. Tienen órdenes de Nam de no molestar si no es algo urgente, ellos claramente no siguen las indicaciones y yo los tapo, por qué soy un cobarde.

–¿que sucede?– me acerco a la puerta y escucho un suspiro largo por su parte. Si continúo así, se molestará más de lo que seguramente ya esta. Esta vez suspiro yo con molestia y abro la puerta con lentitud, lo veo ahí parado de brazos cruzados y tuerce los ojos antes de tomar mi brazo y halarme fuera de mi habitación. –que haces, suéltame por favor– le gritó con miedo y puede que haya llegado a tartamudear y se que Seokjin lo ha notado por qué ha soltado una corta carcajada. Me lleva por todo el pasillo hasta llegar a la recepción, donde normalmente llegan los clientes, y es aquí donde comienza mi trabajo, nada fuera de lo normal, ellos me miran e intentan tocarme pero siempre está Namjoon ahí y él siempre los detiene. Como debe ser, claro.

–te quedarás aquí y harás tú trabajo como debes, llegó uno nuevo y no quiero fallas– me dice. Agacho la cabeza y siento como me recorre de arriba a abajo. No levanto la cabeza y siento su respiración cerca, ruego por qué no se acerque más y cuando siento rozar su mano con mis caderas oigo un grito.

–Kim Seokjin, aleja tus sucias manos de Yoonji o te cortaré los dedos uno por uno– tiemblo un poco, se de quien es la voz y se que lo que dice lo cumple si no le hacen caso. Veo los pies de Jin moverse lejos de mí y enseguida visualizo su risa nerviosa, claro, le tiene miedo. Como todos los demás aquí dentro. Pese a su fuerte carácter y ser la cabeza de este lugar, Namjoon siempre ha visto por los cuidados de los chicos y chicas aquí adentro, aún que los usa de una forma nada normal, aún que le paguen por su virginidad o su belleza, él los cuida. Lo he visto, jamás le ha puesta la mano encima a uno de los de aquí a excepción de los que usan la violencia como Seokjin, Hoseok o sus demás gatos.

–oh! Namjoon, yo no lo estaba tocando solo le quitaba una basurita– se excuso, algo para nada creíble.

–claro– Namjoon se acercó a mí, me acerco a él y, sin una pizca de vergüenza me beso, dulce y a suave. Seguí si ritmo y puedo jurar que solté un gemido. Besa tan bien que no puedo evitarlo. Incluso le importa poco meter su mano debajo de mis faldas para tocarme la entrepierna y acariciar, con Seokjin ahí presente. Abro mis ojos cuando siento sus labios alejarse de los míos y veo al maldito de Seokjin hacer una mueca de asco, poco me importa si tengo a mi novio a mi lado, así que le sonrió de lado.

–namjoon, llegó uno nuevo, Hoseok irá por él más tarde. Solo vine a avisarle a Yoongi que...– Namjoon lo interrumpe.

–yoonji...–lo corrige, pero se que él no va a ceder tan fácil así que solo escucho como ignora eso y continua.

–le avisaba que debía ir a buscarlo para arreglarlo y explicarle lo que hará– termina. Namjoon asiente y se voltea de vuelta a mi.

–cuando Hoseok lo dejé en su habitación irás a ayudarle, ¿ok?– asiento y beso su mejilla. Seokjin se retira de ahí sin despedirse y yo me siento más tranquila. Me alejo de Namjoon para ir hasta el mostrador donde se encuentra un banco y tomó asiento con cuidado de no desplanchar mi linda falda en color aqua, uno de los tirantes de mi blusa se resbala e intento subirlo con cuidado, se que él me está viendo, así que lo provoco un poco. Me relamo los labios y tan rápido termino de hacerlo, ya está pegado a mi, con su mano devuelta en mi entrepierna, besa mi cuello y deja grandes marcas.

–aqui no, amor– lo detengo, lo oigo gruñir. Se que yo lo provoque, pero es precisamente lo que siempre hago. Provocación es la clave para mantenerlo pegado a mi. Se aleja de mi, no sin antes morder mis labios y lamerlos. Me gusta cuando es así de sucio.
De pronto escucho una puerta ser azotada, se que es Hoseok cuando lo veo a lo lejos así que me levanto y tomo a Namjoon de la mano para llevarlo hasta alado del mostrador y ponerlo a mi lado. Agacho mi cabeza en demostración de respeto, aún si Hoseok es menor que yo, aquí dentro sigue siendo más poderosos y no me queda de otra. Miro los pies del chico pasar a mi lado y levanto mi rostro una vez pasan, sonrió cuando me doy cuenta que él tiene la mirada posada en mi. Cuando vuelvo la mirada a Hoseok y al chico, solo alcanzó a ver a Jung desaparecer detrás de la puerta. Creo que quiere un rato para ellos.

Hola, se que me tarde pero aquí estoy de vuelta con esta nueva actualización, espero les guste 🍑 🐈