Perdidos en el mundo del revés.

Capítulo 5

Narra Matt

Pasan los días, llego a casa y me dirijo al salón.

───¿Cuándo vendrá Jim?─── Le pregunto a mi madre.

───No lo sé Matt, tú hermano mayor no nos dijo nada.─── Dice mi madre con desgana y algo molesta, subo a mi habitación.

Abro el libro de biología y geología y comienzo a leer, ya que mañana tengo un examen y no se absolutamente nada.

No me puedo concentrar, sigo pensando en Jim y cuándo vendrá, llevo sin verle más de un año. El tiene 25 años y yo 13, aunque nos llevamos mucho él siempre me a querido y a sido el único de esta casa que a mostrado interés en mí.

Nuestros padres eran igual de desinteresados con Jim, por lo que, se propuso estudiar muchísimo. Pasaba las tardes en su habitación y cuándo salía estaba conmigo. Me enseñó a leer y a escribir y con él las cosas eran más fáciles.

Era un celebrito, le pasaron dos cursos y él siguió esforzándose muchísimo a pesar de que la gente se metía con él por entrar a la secundaria con 10 años.

Y cuándo cumplió la mayoría de edad decidió irse de aquí enseguida, no soportaba a sus padres, por lo que se mudó con su novia. Al principio, hablaba con él todos los días. Luego estaba muy ocupado estudiando y trabajando a la vez.

Y hace ya casi dos años se casó con Lily. Me sentí muy feliz de ser invitada ya que no lo veía desde hace dos meses y eso para mi era horrible. En la boda discutió con nuestros padres y juró que no iría a visitarlos nunca más. Y aquí estoy, llevo prácticamente 2 años sin ver a mi hermano.

Después de la boda, solo me llamó una vez. Diciéndome solo a mí que en un mes su esposa iba a dar a luz a una niña, la llamarían Clarie, me explicó que me quería y cortó la llamada.

Mi sobrina tendrá ya 1 año y yo aun no la he visto. Desde ahí suelo preguntarles a mis padres si saben algo de Jim. Realmente le extraño.

Salgo de mi habitación bastante nostálgica y me miro en el espejo del pasillo, me recogo el pelo en una coleta mal hecha y miro mi blusa gris y mis vaqueros azules. Trago saliva y doy la vuelta para bajar las escaleras, pero me choco con la barandilla y caigo rodando por las escaleras. Al caer, le doy un fuerte golpe al mueble de ls entrada y me duele mucho. El jarrón se cae y grito, se parte en cientos de trozos y se rompen un poco los vaqueros.

"Menos mal que llevaba pantalones largos" Me digo para misma.

Noto que me duele mucho todo el cuerpo de la caida y mi madre viene corriendo.

───¡Madre mía Matt has roto el jarrón de ti abuela! ¡¿Que tienes que decir a respecto?!───

La rabia se apodera de mí, me levanto y me doy cuenta que la pierna me mata por lo que me caigo y al intertar apoyarme me corto un poco con el jarrón las manos.

Me vuelvo a levantar ahora con cuidado y me miro rápidamente al espejo, mi blusa gris está llena de sangre y mis manos chorrean, tengo un moretón el el brazo izquierdo y noto como mis pantalones están rotos, por no hablar que en uno de ellos tengo una mancha grande de sangre.

Miro mi madre, la que repite.

───¡Dije que te disculpes!─── Chilla.

Y respondo claramente. ───Que te jodan.───

───¡¿Cómo dices?! ¡Estás castigada!───

Uso todo mi esfuerzo para agarrar una llaves específicas del cuenco del mueble, salgo corriendo mientras me duele todo el cuerpo de esa asco casa y enciendo la vieja moto de mi padre.