Tae entró en la cocina tan feliz como siempre. Y se puso más feliz aún porque en cada mesa estaban preparando pastel. Se adentró rápidamente y se puso en la espalda de su hyung para admirar como glaseaba de chocolate un montón de pastelitos en una bandeja.
—¡Aish! —Jin pegó un respingo al sentir una respiración en su cuello— Tae, creí que ya no vendrías hoy.
—No podía fallarte. Soy tu degustador fiel —sonrió.
—Te guardé los primeros que hice. Están en el congelador, seguro ya están listos —dijo el mayor señalando con la cabeza en una dirección.
—¡Oww! Eres mi mejor hyung. —Su sonrisa ya no podía ser más cuadrada de lo que estaba. Le dio un abrazo de un modo muy tierno a Jin en su gran espalda y corrió como niño pequeño a buscar su salida del sufrimiento. Sabrosos pastelitos de chocolate hechos por Jin.
—No deberías comerlos todos tu sólo. Ve a compartirlos —le ordenó Jin y siguió en su tarea.
—Sí, hyung. Jiji. —Con la bandeja en una mano y en la otra un pastelito salió del taller de cocina.
Pensó en ir a su cuarto, pero seguramente no habría nadie. No tenía ni idea de dónde podría estar Jimin, ya que desde el primer día de clases desaparecía sin decir a dónde iba y luego volvía a aparecer como si nada. Sin embargo, Tae no le preguntaba qué había estado haciendo, pensando en que probablemente la respuesta iba a ser "cagando".
«Ese chico caga muchas veces al día», «en cualquier momento va a desaparecer debido a sus dietas extremas» —pensó Tae Hyung y decidió guardarle un pastelito.
Siguió caminando sin rumbo, hasta que pensó en su hermano.
«Seguro hyung debe tener hambre también» —volvió a pensar.
Le texteó para saber si estaba desocupado, porque no sabía sus horarios. Al recibir respuesta comenzó el rumbo hasta las habitaciones de los ayudantes.
Golpeó la puerta un par de veces y en dos segundos esta se abrió.
—¡Taehyunie! —lo recibió un alegre y algo despeinado Chanyeol— ¿necesitas de tu hermano?
Tae iba a responder, pero de adentro del cuarto lo interrumpieron.
—Yeol, déjalo entrar —le pidió—, no he visto a mi hermanito en días.
Al entrar se percató que tanto Chanyeol como su hermano iban en calzoncillos. Se sorprendió y rió a la vez.
—¿Acaso interrumpí algo? —dijo levantando una ceja.
—Acabamos de despertar —dijo Baekhyun rápidamente, en modo de respuesta— ¿qué es lo que traes ahí?
—Deliciosa comida —les dijo tratando de ocultar una risa—, Jin la hizo.
Sabía que su hermano y su novio no compartían cuarto, pero no quiso seguir con el tema.
—Se ven sabrosos —dijo Chanyeol tomando uno.
—Ese Jin, debería estar estudiando para el examen de literatura, pero se dedica a hacer pastelitos —farfulló Baek—. Sin embargo, están muy ricos -agregó luego de probar uno.
—Bien, debo irme —dijo Tae— Jimin aparecerá en cualquier momento y le recibiré con un pastelito.
—¿Aparecer? En dónde anda.
—En el baño.
—Mmm, dile que deje sus dietas raras —le dijo su hermano— y trata de no deambular sólo, cada año este internado es más aterrador.
ESTÁS LEYENDO
AISLADOS. El Miedo No Anda En Idols... Bueno Sí
FanfictionEn la Isla Soju se encuentra el internado más prestigioso de artes de Korea. No cualquiera entra, pero eso no es lo que importa en esta historia. Los edificios son realmente antiguos, por lo que los estudiantes sólo deben deambular por los espacios...