9
"Pasado"
-Bueno, es una larga historia...
Izuku Midoriya secó el sudor de su frente, se arremangó la camisa y respiró lentamente para no morir de frustración.
Sacó las dos últimas monedas que le quedaban, introdujo una de ellas en la ranura de la máquina y esperó con fingida paciencia el sonido metálico que producía al caer antes de meter la segunda. Esta se quedó atascada, pero no se necesitó mucho más que un pequeño empujón para arreglarlo. La música estridente e irritante comenzó y las luces intermitentes de todos colores se encendieron otra vez, esta era su última oportunidad.
Pegó la nariz al cristal y sus dedos se aferraron con fuerza a la bolita roja de la palanca, moviendola hacia arriba, a la derecha, un poco hacia abajo, arriba otra vez -se había pasado- y de nuevo a la derecha. Se alejó unos cuantos pasos del vidrio y examinó la situación, el gancho se encontraba treinta centímetros sobre su objetivo y, teniendo en cuenta la pequeña rotación que hacía al descender, las probabilidades del éxito eran bastante altas. Cruzo los dedos y apretó violentamente el botón verde con la palma de la mano. Medio segundo después el gancho descendió, atrapó la cajita y su corazón dio un vuelco. Estaba tan cerca que podía imaginarla en sus brazos.
Cuando la garra de metal volvió a trazar la misma línea recta hacia arriba, el movimiento fue demasiado brusco y su preciada figura cayó sobre un oso de peluche y un colorido mazo de cartas de Yu-gi-oh. Observó al gancho plateado abrirse totalmente vacío y la música apagarse al igual que las luces. Los dibujos de patos que adornaban las paredes de la máquina parecían estar burlándose de él. Los ojos se le llenaron de lágrimas y le dio un rodillazo, con la bronca ardiendole dentro después de haber gastado tanto dinero para nada.
-¿Estabas tratando de conseguir esa figura de All Might?- preguntó un chico rubio, que había estado mirándolo todo el tiempo.
-¿Eh? S-sí- asintió Izuku e intentó ocultar su rostro.
-Déjame intentar.
El extraño introdujo dos monedas y se concentró todo lo que pudo bajo la atenta mirada de Izuku. Maniobró y apretó el botón con bastante rapidez, porque pensaba que si se daban demasiadas vueltas era inútil. El gancho se desvió al bajar, agarrando una bolita de plástico azúl oscuro con un signo de interrogación dibujado en rojo. Le había tocado un regalo sorpresa.
-¿Qué es?- preguntó Izuku entusiasmado, ya había olvidado su frustración inicial.
La esfera estaba compuesta de dos mitades de plástico, que eran pegadas entre sí con calor lo suficiente como para que se mantuvieran juntas pero fuera fácil de desarmar. El chico la abrió ejerciendo presión con los dedos índice y pulgar, apoyados justo sobre la unión. El plástico cedió sin esfuerzo.
Izuku se acercó para ver el premio entre sus manos. Era uno de esos adornos para celulares, que se meten en la entrada de los auriculares y la protegen del polvo. Era del mismo material que su contenedor y tenía la forma de un pequeño conejito blanco, que sostenía un cono de helado.
-Puedes quedártelo- dijo él, y le ofreció el muñequito. Izuku lo aceptó y levantó la cabeza, mirándolo a los ojos por primera vez.
-¿Bakugo-kun?- preguntó, sorprendido.
-Nos vemos el lunes en la escuela, Midoriya-kun.
Esas habían sido las primeras palabras que Izuku había compartido con Kacchan. Ninguno de los dos era consciente todavía de que su relación cambiaría drástica y rápidamente los siguientes meses, y es que realmente tenían mucho en común. La más importante de esas cosas era que, a partir de ese momento, habían comenzado a quererse.
YOU ARE READING
♥Charming Type♥ // TodoDeku
FanfictionHacer nuevos amigos, conocer chicos misteriosamente atractivos, mirar el peligro a la cara y dormir ocho horas diarias. Comenzar las clases en una nueva escuela es fácil, ¿No? //AU// Sin quirks