☆ 𝑻𝒉𝒆 𝒑𝒂𝒓𝒆𝒏𝒕 𝒕𝒓𝒂𝒑 - 𝑺𝒕𝒐𝒏𝒚 ☆

18. This Will be ♡

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Cuando llegaron a Londres, la lluvia nunca los abandonó al igual que el silencio que rodeaba a Tony y Harley.

En todo el transcurso del viaje fue así, y el no podía hacer nada cuando su hijo quitaba la mirada ocultando alguna lágrima salvaje.

Llegaron a casa, siguiendo con el silencio sepulcral.

—Nick—llamó cuando ponía el paraguas a un lado. Algo lo inquieto al no tener una respuesta—¡Papá Nick! Sal a las 1, a las 2...

—¿Abuelo?—llamó Harley entrando a la sala.

Tony ya algo preocupado fue a buscar al lugar de siempre del hombre—Harley espera aquí.

El niño sólo asintió mientras se sentaba en el sofá. Tony por mientras entró a la oficina, y como pensó, el hombre leía el periódico.

—Hola anciano—saludó el con una burla.

El periódico bajo, pero no era Nick quien estaba detrás del periódico, era Peter. Tony quedó tieso en su sitio.

—Hola mamá. ¿sabías que el Concorde te trae a la mitad del tiempo?—preguntó como si nada el chico.

Tony balbuceo, muy desconcertado—S-si... Algo así.

Harley entró a la oficina, y se sorprendió por la presencia de su hermano. Sonrió—¿Qué haces aquí?

Peter se levantó de su asiento mientras explicaba con una sonrisa—Cuando ustedes se fueron. Nos tomó 30 segundos, en darnos cuenta que no queríamos perderlos de nuevo.

—¿Darnos?—cuestionó confuso el Stark.

—Así es—entró Steve de repente en el lugar. Tony se le escapó al aire al verlo—Me equivoqué al no buscarte antes... no cometeré el mismo error otra vez.

Tony apretó los dientes, tratando de no llorar, no quería hacerlo. No quería.

Se acercó a el, con el nudo en la garganta, le empezó a hablar—¿Y supongo... que ahora quieres que me tiemblen las piernas? ¿Que me arroje a tus brazos, llorando histéricamente?...

Steve sólo guardo silencio mirando al más bajo.

—Y que diga: yo sabía que esto pasaría, ahora nuestra relación será maravillosa, ya que cuidaremos a nuestros bellos hijos juntos, y seremos felices por siempre... como los cuentos, envejecer y-

Las palabras de Tony quedaron ahogadas en su garganta viendo a los ojos a Steve, mientras sentía algunas lágrimas rodar por sus mejillas.

El sonrió—Dime Steve, ¿Qué esperas realmente?... ¿Qué vivamos felices y juntos para siempre?

Steve puso ambas manos alrededor del rostro de Tony, para calmarlo—Si, juntos. Y por lo que dijiste... Pero Tony, no tienes que llorar..

Tony carcajeo como si hubiese sido una broma—No, no... si tengo que.