~11~ (Dia 1 3/3)

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Narra Agus

Me estaba riendo cual foca epiléptica. Thomi solo bajó su cabeza y se quedó quieto.
Luego de que me calmara un poco y mirara con más atención la escena, me di cuenta de que el no se había movido de su posición.
Ya no respiraba. Me estaba comenzando a alterar.

- Vamos Thomi - dije moviéndolo, corrijo, tratando de moverlo, la verdad es que estaba tieso - ya, no juegues, me estás asustando - ya, mi alteración está al máximo. Corrí hacia la cocina y busqué el vaso más grande que se hallara en ese lugar. Lo llené de agua y corrí de nuevo donde estaba Thomi. Pero, valla sorpresa me llevé, ¡el no está aquí! - ¡Thomi, donde estás! ¡¿Me oyes?! ¡Si esto es una broma te juro que te quedas sin pelotas! - amenacé con la esperanza de que el apareciera, pero eso no sucedió.
Miré a mi alrededor tratando de buscar una idea, y la encontré, por favor no piensen que estoy loca, pero tenía que actuar.
Agarré el cuchillo que estaba en la mesa y miré una vez más a mi alrededor. Nada.

- Thomi, tengo un cuchillo y no tengo miedo de ponerlo en acción - dije al aire.

- ¡¡¿Estás loca o que?!! - dijo apareciendo de repente y quitándome el cuchillo.

- ¡¿Cómo se te ocurre desaparecer así?! - pregunté exasperada.

- ¡Tu me jugaste una broma, tenía que devolvértela! - gritó extendiendo sus brazos.

- ¡Ya, no fue tan sarpada como la tuya! - grité.

- Bien, mira - dijo tratando de calmarse - estamos a mano, ¿si? Solo no vuelvas a tomar un cuchillo con intenciones que no sean cortar comida - dijo señalándome. Yo asentí y sonreí.

- ¿Que te parece si terminamos de comer? - propuse. El asintió y nos sentamos nuevamente al rededor de la mesa.

[.....]

Narra Thomi

Terminamos de comer y nos dispusimos a ponernos de acuerdo en donde íbamos a dormir. Lo cual no fue muy sencillo. Finalmente, decidimos una cosa.
Fuimos a su casa y buscamos colchas, almohadas, su pijama de Stich y su preciada nutella. Luego fuimos a mi casa y buscamos exactamente lo mismo, a excepción del pijama y la nutella.
Una vez que buscamos las cosas necesarias para una noche, nos dispusimos a ir al parque de la zona. Íbamos a dormir al aire libre, bajo las estrellas. Así lo dijo ella.
Extendimos la colcha grande que ella había traído y pusimos su almohada y la mía. Con la colcha que puse de mi parte, nos tapamos y ella se puso a comer nutella mientras veía una serie o película animé.
Yo, por mi parte, me dedicaba a leer, se estarán preguntando si tengo visión nocturna. Dejenme decirles que no, para leer en las noches, utilizo una mini linterna que se prende al libro, y lo mejor es que es recargable y no a baterías.

- ¿Te apetece jugar a algo? - dijo apagando su celular y dedicando toda su atención a mi persona.

- Claro - dije apagando la mini linterna y serrando el libro - te escucho, ¿cual es tu idea? - dije interesado.

- Cada uno va a nombrar palabras raras de las cuales sepamos el significado y la otra tiene que adivinar que significa, de lo contrario, tiene que contestar una pregunta que le haga el oponente - dijo reincorporándose sobre la colcha. Sinceramente, ese juego me gustaba mucho. Se oye de mi estándar.

- Me parece bien, ¿quién empieza? - pregunté.

- Te concederé ese privilegio a ti - dijo.

- Bien, Em... - me quedé un minuto pensando, le mandaría indirectas, depende de ella si las capta o no -  manihlapinata - pronuncié lentamente para que entendiera, por que si, la palabra era bastante difícil.

Cuidado con lo que deseasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora