"Dejen de mirarme así y ayúdenme" decía la canción que estaba interpretando la última vez que le vieron con vida.
Claro, que todos pensaron que era una broma.
Todos están tan acostumbrados a bromear con la depresión y otras enfermedades mentales, incluyendo las tendencias suicidas que pocos se lo toman en serio. Y él en especial bromeaba con el sucidio todo el tiempo.
¿Cómo iban a verlo venir?
Un día estás cantando, tocando y riendo como si todo en la vida fuera excelente y al día siguiente te encuentran colgado porque nadie supo interpretar tu llamado desesperado de ayuda.
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34 microrrelatos tristes para gente triste
القصة القصيرة34 micrrorelatos escritos en 99 palabras o menos.