Body & Soul

Control

No se trata de control.

No quiero hacerte mía por una cuestión de poder y sumisión.

Sólo quiero verte. Sólo quiero tocarte. Sólo quiero besarte. Sólo quiero amarte.

Sólo quiero hacerte mía en la misma medida en que soy tuya.

Ver tu cuerpo relajado, expectante, reaccionando al simple roce de mis dedos... Tu sonrisa apareciendo tan hermosa como siempre y que se mantenga así cuando me acerque a ti, hasta que se borre poco a poco en inversa proporción al hambre que mi boca te despierta.

Tú sabes lo que sigue. 

Me has visto en tu lugar siempre. 

Quiero verte temblando, quiero hacerte sudar, quiero escuchar tu voz pidiendo más, la vena de tu cuello reventando al final, donde quiero que te deshagas en mis manos, frente a mí, debajo de mí, justo a mi lado, que te fundas conmigo y nos reconstruyamos. 

Quiero gozar con el placer que te ofrezco. Quiero respirar el aroma de tu éxtasis. Quiero hacerte sentir lo que yo siento.

Encontrar en tus ojos esa mirada ebria de amor con equivalente deseo. Unir tus lunares uno a uno con la punta de mi lengua. Trazar tu espina con el desliz de mis dedos.

No quiero controlarte. No quiero dominarte. 

Quiero regalarte lo dulce de un orgasmo en manos de quien más te ama. Quiero agradecerte tu confianza, tu cariño, tu alma honesta... y honrarla de la mejor manera, cuando termines con mis besos en tu vientre, con las cosquillas de mis yemas en tu pecho.

Te quiero libre. 

Te quiero plena. 

De cualquier manera... Tu sabes que contigo no conozco de control.