Bleeding { Joshler }

4

Sabe que debe decir algo rápido antes de que el castaño delante de él le empiece a ver raro y se empiece a incomodar porque le está viendo demasiado fijamente.

- l-lo siento .- dice finalmente, titubeando gracias a sus nervios.

El chico solo le dirigió una sonrisa amable y casi se siente derretirse.

- no, lo siento yo .- se disculpó el Omega igual.- iba distraído y no ví por donde iba y choque contigo .- luego miró brevemente la malteada en el suelo y añadió.- y creo que tiré tu malteada .- rio levemente.

- no, no, no la tiraste .- se apuró a decir.- fui yo.

- ¿así que tiraste tu propia malteada? .- le preguntó divertido.

- soy torpe .- respondió sonriendo tímidamente.

- va .- el Omega soltó una risa.- te compraré otra.

- no, no tienes que hacerlo .- le dijo rápidamente y moviendo sus manos nerviosamente.

- quiero hacerlo .- le contestó sonriendo, algo divertido por la situación.- pero no aquí, conozco un lugar mejor.

- ¿Un lugar mejor? .- inquirió con curiosidad a lo que el de ojos miel asintió.

Y aunque tal vez ya no estuviera tan nervioso como en un principio aún podía sentir los nervios en alguna parte de su ser junto al cosquilleo en su estómago parecido a la emoción y cierta felicidad combinadas, era una sensación rara pero agradable.
El problema de ser humano es que nunca sientes una emoción a la vez y a veces resulta abrumador.

También si esto fuera una película y la camara estuviera en la posición correcta se podría ver de fondo como Brendon y Jenna se dan cuenta de la situación y como éste último alza sus brazos con emoción e intenta gritar algo pero es callado por la mano de la rubia en su boca, quien lo toma y lo arrastra con dificultad lejos de ellos, para que no hubiera alguna interrupción ya que era consciente de lo que podría pasar ahí, si es que había suerte.

- pero está un poco lejos de aquí .- continuaba hablando el castaño.- de hecho, bastante lejos .- rió comenzando a caminar junto al pelimorado.- tal vez podríamos ir, ¿mañana? .- sugirió.

- ¿M-mañana? .- preguntó nervioso el Alfa.

- Sí, mañana .- respondió.- es decir... ¿te gustaría?, ¿no estás ocupado mañana o sí?, si es así podría ser otro día o tal vez no quieras...

- mañana .- interrumpió Josh sonriéndole al notar que el chico se estaba poniendo un poco nervioso.- mañana está bien.

- está bien .- el Omega suspiró algo aliviado.- ¿A qué hora te gustaría ir?.

- ¿Qué hora es mejor para ti?.

- hum...- el castaño se balanceó un momento mientras caminaban.- ¿A las 5 te parece?.

- me parece bien .- le sonrió recibiendo otra sonrisa de vuelta.

Es entonces que Josh se da cuenta de algo que le resulta gracioso, ya que han planeado una salida y ni siquiera se han dicho sus nombres, por lo que no puede evitar reír llamando la atención del otro.

- eh, am...- el Alfa vuelve a reír divertido antes de parar un poco y estirar su mano hacia él para estrecharla.- soy Josh .- se presenta.

- Oh .- suelta el Omega y parece darse cuenta de lo que resulta gracioso porque ríe también antes de estrechar la mano cálida contra la suya.- Tyler.

- un gusto, Tyler.

- igual, Josh.

Cuando se despide de Tyler después de intercambiar números de teléfono, ya que por suerte llevaba el suyo consigo y no lo había dejado en casa, y regresa con sus amigos es Brendon quien le ataca con preguntas constantes sobre qué sucedió o de qué hablaron, y cuando al fin le comenta que tiene una salida con él mañana es el Beta quien el resto del camino se la pasa diciendo que tiene una cita.

Cuando llegó a casa lo primero que hizo fue abrir su computador (después de leer un poquito el manual a su lado), e ir a la zona de carpetas y documentos para abrir uno nuevo en blanco y comenzar a escribir sobre Tyler, cada cosa, y no parece percatarse o que lo hará, que en verdad está anotando cada cosa, lo que no ha hecho con los demás.
Después de cenar y ver unos momentos la televisión es que empieza a escribir pequeñas notas y las pone en sus brazos, y luego, ahora no es un papel de nota lo que toma, sino una hoja de cuaderno donde escribe sobre su salida mañana con Tyler, en dónde, la hora y recordándole que tiene su número de teléfono para que no se le ocurra borrarlo, así que cuando termina de escribirlo en letras grandes toma un montón de cinta, la enrolla y la pega en la hoja y se la pega en la frente de una palmada.

Y así se fue a dormir, feliz.