KILL THE ILLUMINATI

Reunión

Al final todo es un dado. Las victorias, las derrotas, una historia de superación solo es movida por la perspectiva del que la cuenta. Puede ser, que, el azar para tu caso, nunca esté de tu lado.

A las 10 de la noche comenzaría la reunión. No era una reunión normal, era una reunión de emergencia. El antiguo cuartel general, en dónde los agentes habían discutido aquel arriesgado plan con anterioridad, ya no existía. Y es que acaso, ¿Podemos culparles? ¿Podemos decirles que, el humano no tiende a fallar? Que la expectación y el emocionalismo, ¿no afectan en como desarrollas tu razonamiento?

Aquel era el problema. En la guerra, en la guerra no importa si tu corazón arde o no. No importa si tomas el arma con tu alma en llamas, deseoso de aniquilar al enemigo. En la guerra lo que realmente importa, es saber cómo tomas aquel arma, hacia donde debes dirigirte, que hacer en caso de cada dispersa situación, nunca perdiendo la cabeza.

En la sede número 2° fue donde, el General, XoXe, M y D se habrían reunido a eso de las 10 de la noche.

- No es necesario que digas nada. No es necesario que se disculpen ni conmigo, ni con J y O  estén donde sea que estén. - pronunció con un aire de lamento el General. - lo que más me choca y duele en estos instantes, fue la falta de profesionalismo que demostraron a la hora de ejecutar el plan, pero de qué sirve lamentarse ahora, dé que sirve culparlos. La Organización está destruida, el cuartel general fue allanado por los Guards y la represión ha sido aumentada. Simplemente fallamos, chicos, y con ello el futuro de la sociedad.

- Sé que suena ilusorio, pero, ¡no deberíamos darnos por vencidos tan rápido General! Aún quedamos nosotros, nosotros cuatro, ¡podemos rescatar a O y J!- respondió XoXe, intentado dar solución al problema en el que se habían metido.

- ¡No seas tan imprudente!- dijo golpeando la mesa en la que estaban sentados- ¡No sabemos en dónde están! ¡No sabemos si siquiera están vivos! ¡Esto no es una novela ficticia en dónde es fácil rescatar y darle vuelta al tablero! La base fue atacada, muchos agentes murieron, ¡Ni siquiera disponemos de los números! Sólo sabemos que serán entre 500 u 800 aproximadamente! ¡Estamos jodidos!-.

- ¡No pienso dejar a mis amigos atrás!- declaró el novato.

- No somos amigos. Somos compañeros, estoy seguro que O y J no querrían ser rescatados. Saben que el compromiso de la organización está por sobre ellos, por sobre nosotros. No nos debemos a nosotros, nos debemos a la sociedad. Vivimos en una sociedad.- dijo M, acatando la orden del general.

- Me duele mucho, años de entrenamiento, pero, ni siquiera deben estar vivos. La gente de allá fuera nos necesita, de hecho eso dirían ellos si estuvieran aquí.- complementó D.

- Y si piensas en hacer una vez más tu show, novato, serás expulsado de la organización. Así de simple. Sólo nos queda esperar órdenes del director de la organización. Por lo demás, quedan libres de acción, deben volver a sus vidas cotidianas. Les otorgaré estos chips de identificación; ahora ya no son las mismas personas de antes, prácticamente les hicimos una nueva vida, tienen departamento, lugar de trabajo, y un pequeño dinero inicial. Es lo último de la organización.- concluyó el General.

-¡¿Que, es una broma?! ¿Aquí es donde termina todo?- gritó el novato.

- No, chico. Aquí es donde empieza todo. Recibirán órdenes en algunos meses, cuando la cuestión haya mejorado. En el caso de que no, también serán notificados. Suerte con sus nuevas vidas, manténganse alerta, y muerte al rey.

-¡Muerte al Rey!- respondieron todos.