Nazo no kanojo Z "lazo de saliva"

Misterioso ¿Cambio de papel?

Con el cabello alborotado y, como ya era costumbre, callendole frente a los ojos. Ayume desperto con un bostezo duradero, se restrego los ojos y se levanto con un poco de pereza de la cama.

Se diriguio a su cocina y abrio el refrigerador donde se encontraba una caja de jugo de manzana, una "cartera de huevo", un paquete de salchichas y varios condimentos e ingredientes. Tomo la caja de jugo, dos huevos y dos salchichas.

Dejo todo en la mesa que estaba a su lado y se acerco a la estufa, la cual se quedo viendo durante un momento. Tomo el encendedor largo y lo acerco mietras su mano izquierda iba a la perilla. Con rapidez giro esta y presiono el gatillo con lo cual encendio la estufa y quito ambas manos.

Puso un sarten en este y derramo un poco de aceite y lo dejo calentandose. Tomo ambos huevos y los rompio golpeandolos el uno contra el otro, los dejo caer en un plato y los batio.

Cuando se hubo calentado el aceite, puso ambas salchichas en un rapido movimiento. Con el sonido que producia el aceite caliente en contacto con la carne se dispuso a servir en un vaso de cristal un poco de jugo.

A su nariz llego el aroma de carne cocinada, por lo que procedio a sacar del sarten ambos, dejando escurrir un poco el exceso de aceite que pudiera tener.

Tomo el plato donde estaba el huevo batido y lo acerco con cautela al sarten, lo giro un poco y el contenido cayo en el sarte, produciendo el sonido caracteristico de desayuno preparado con lentitud y...¿temor?.

Ayume dejo caer el huevo el sarte y cuando hubo caido la ultima gota, retiro con un poco de prisa su mano. Habia caido una pequeña gota de aceite en su mano, y, aunque no dolia, le habia tomado por sorpresa haciendo que el plato casi cayera en el sarten.

Dejo el huevo preparandose a fuego intermedio y se dirigio a la mesa aledaña y tomo un vaso de cristal, posteriormente se sirvio un poco de jugo y lo bebio de forma calmada...
Pero no lo disfruto mucho, pues un aroma extraño llego a su nariz, volteo y observo un pequeño hilo de humo en el sarten.

Rapidamente se diriguio a la estufa y volteo el huevo, confundida por la rapidez de coccion. Bajo su vista a la perilla y se dio cuenta que estaba en "MAX". Al parecer lo habia dejado a flama alta, aunque esto no era comun, y de hecho, hiso que Ayume se confundiese mas. El dia de hoy, estaba distraida por algo... ¿o alguien?.

Tras haber confirmado que su desayuno estaba listo, se diriguio con su plato a la sala, encendio el televisor y dejo su comida en la mesa que quedaba frente a su sofa.

En la television daban Gyakuten Saiban, con su pegadizo intro sonando. No era que a Ayume le llamase mucho la atencion ese tipo de programas, pero ultimamente le comenzaban a llamar la atencion, quizas en parte, culpa de cierto chico.

El televisor sonaba con fuerza, mientras Ayume veia como se desenvolvia el caso con, ciertamente, curiosidad.

¡Igi Ari!.

Gritaba el ave que renace de sus cenizas demostrando la prueba que determinaba la equivocacion en el testimonio del testigo.

Ayume termino su desayuno y se dirigio a su cuarto, donde se encontraba su uniforme listo, solo faltaba que se diese una ducha, lo cual hiso con un poco de rapidez.

El agua goteaba por su mejilla, y su cabello se pejaba a su frente, ya era algo muy normal para ella que eso sucediese, por lo que no le daba importancia y solo lo movia un poco a la izquierda.

Terminada la ducha, regreso a su cuarto, donde en su cama estaba su uniforme. Se puso la camisa y posteriormente la falda, con calma y serenidad introdujo sus piernas blancas y tersas sobre las medias claras. Se dio un vistazo frente al espejo y zarandeo un poco su cabeza.