Espacio común del edificio de Jennie– Sábado a la mañana
- ¿Puede colocar los juegos al fondo del jardín? No quiero que los niños anden correteando cerca de la mesa de tartas - Jennie estaba dando indicaciones acerca de cómo organizar las mesas y demás cosas para el cumpleaños de su hija – Y de paso dígale a la pelinegra malhumorada que la necesito – la morena había puesto a su amiga como encargada de los postres y Jisoo llevaba dos horas gritándole a cualquiera que se atreviera siquiera a echar una mirada a sus preciadas tartas. –Puffff – suspiraba agotada la diseñadora. La semana anterior al cumpleaños de su hija había sido... intensa, por así decirlo.
Por empezar, después de la noche del "trágico" accidente del parque por el cual Lisa fue declarada culpable y sentenciada a pasar la noche en su últimamente desalojado departamento, despertaba lista para iniciar su semana laboral con una imagen que la desestabilizó emocionalmente... La mismísima Lalisa Manoban estaba durmiendo en su sillón. Pero no estaba sola, en sus pies se acurrucaba un pequeño Kuma y entre sus brazos se acomodaba una niña morena idéntica a Jen pero que cada vez se parecía más a Lisa.
Durante el resto de ese día no pudo concentrarse en nada, no lograba enfocarse en su trabajo, no encontraba un lugar para meter todos los invitados al cumpleaños de su hija... no podía hacer nada. Lo único que su mente hizo fue divagar entre varias imágenes: su novia y ella, su novia y su hija durmiendo en el sofá como dos ángeles, su novia y ella en la cama un día domingo jugando con cinco o seis mini Jennie o mini Lisa. La foto de una familia perfecta la persiguió durante todo ese día. Jennie quería a Lisa a su lado para toda su vida y lo quería ya. El problema fue que al día siguiente, durante la segunda prueba del vestido de Jisoo y el suyo de dama de honor, a la morena se le ocurrió la brillante idea de consultar su futuro con la pelinegra, y recibió una respuesta que al parecer ya era común entre sus amigos "¿estás loca, borracha o que?" Jisoo, no solo estaba opuesta a la idea de una numerosa familia, sino que pensaba que su ex capitana se estaba apurando demasiado. La artista se obligó a sacar esa imagen de su cabeza.
Pero Lisa no ayudaba. Ese mismo día la morena jugaba en su estadio, y a pesar de que la jugadora insistió que Jennie , su hija y sus amigos vieran el partido desde el palco porque no quería que su rubia tuviera que aguantar las cosas que se dicen desde la tribuna, el grupo, liderado por Moon y Jisoo, no se dejó convencer y se sentaron en la misma fila del primer partido. La fotógrafa le aseguró a su novia que no tenía que preocuparse pero como la rubia no quería pasar otra noche sola en su departamento recurrió a las demostraciones públicas. Y por demostraciones públicas me refiero a que luego de que el locutor del estadio la presentara como "la estrella del equipo" y Lisa saliera a la cancha lista para jugar, la deportista cruzo varias filas de las gradas para llegar a su novia, agarrarla de la cintura, levantarla y besarla al mejor estilo "¡OIGAN! MIREN TODOS, ELLA ES JENNIE KIM Y ES MI NOVIA" Este gesto no sólo hizo que Lisa sumara puntos ante la LPDJ, sino que hizo volver las imágenes a la cabeza de la morena fijándolas aun más si era posible.
Obviamente esa noche a ninguna revista o diario le importó que Lisa hubiera echo 47 puntos rompiendo un record absoluto en el club, la noticia era otra y los periodistas ya tenían su tapa para el día siguiente. Los periodistas, otro tema que a Jennie no le sentaba muy bien. Ya no sólo hacían vigilancia en su estudio sino que también se los encontraba en la puerta de su casa, en el colegio de Ella y hasta Jisoo se quejaba de haber visto uno que otro rondando por su vecindario. Sin contar que luego de la famosa declaración de amor pública de su novia los celulares de ambas chicas no pararon de sonar. Lisa recibió todo tipo de llamados, familiares, de amigos, empresarios, firmas que la querían para hacer negocios y hasta inclusive amenazas de distintas mujeres, una en especial le llamó mucho la atención porque la voz de la mujer era sospechosamente parecida a la de la maestra Blanchart. En el teléfono de la rubia , por el contrario, no se podían identificar nombres, sólo aparecía "chica noche de lluvia en boliche", "chica karaoke", "rubia noche en la playa", etcétera, etcétera. Jennie hizo que su novia atendiera una por una de las llamadas y se disculpara con las mujeres que llamaban. Bueno eso fueron los primeros llamados, porque apenas la artista empezó a notar como esta modalidad, en vez de que las mujeres se alejaran de su novia, hacía que la vieran más interesante aun, fue ella misma quien se encargó de las disculpas. De más esta decir que eso no terminó muy bien y que Lisa nuevamente terminó en el sillón de Jennie con el cachorro y Ella acomodados en ella.
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Cuándo, Dónde y Cómo el Amor Quiera
Fiksi PenggemarLalisa Manoban es una aclamada jugadora de básquet en Londres hasta que es elegida para jugar en la WNBA, con un pasado negro y su fama de mujeriega irrumpe en New york sin saber que un encontronazo con una morena, mandona e idiota le va a cambiar l...