Caos | Fack AU.

Capítulo 3.

Luces de muchos colores brillan en el centro del parque nocturno, la gente se arremolina alrededor del concierto callejero.

—¡Siempre quise ir a uno de estos!— dice Jack al oído de Finn, para poder hacerse oír por sobre el bullicio de la multitud.

—¿A un parque?— Finn ladea la expresión.

Jack lo mira divertido, como si hubiera dicho un chiste.

—No, a un concierto nocturno, bobo— aclara con diversión y lo tira del brazo, estirando un poco su chaleco rojo—. Ven, vamos más adelante.

Finn está aturdido. Son demasiados sonidos y formas y personas. Nunca había estado en un lugar tan repleto de gente, es aterrador e impresionante. Y la sonrisa de Jack lo aturde aún más, aunque no sabe porqué.

Un poco más allá de todo esa masa de gente, hay un escenario pequeño y rústico, instalado manualmente por los mismos músicos de turno, que ahora preparan sus instrumentos para la primera canción.

Jack nunca había ido a uno, pero sabía que siempre estaban haciéndolos y había deseado ir a uno por mucho tiempo. ¿Ir con un desconocido? Eso era un locura improvisada, pero Finn era lindo y no se parecía en nada a nadie de esa ciudad y... Jack no quería quedarse solo aún.

—Que suerte— sonrió el más bajito—. Llegamos justo para la primera canción.

La banda (compuesta por tres chicos y una chica) toca como primera canción un cover de Radioactive- Imagine Dragons.

Finn observa a Jack saltar y cantar, y eso le hace sonreír levemente. Hay algo que ve en Jack que nunca había visto en nadie. Había pasado la vida encerrado, aislado del mundo porque su padre así lo quiso...

¿Así se siente saborear la libertad?

Jack tiene un noséque que hace que Finn no pueda apartar la mirada de sus risos castaños, su pequeña nariz y sus ojos miel.

—¿Te gusta?— pregunta Jack a Finn, elevando la voz para hacerse escuchar por sobre la música y el barullo de la multitud.

Finn le sonríe.

—Es asombroso, gracias por traerme.

Jack le guiña un ojo.

—Lo que sea por mi salvador.

Finn mira a su alrededor y ve a dos chicos que bailan juntos. El más alto abraza al más bajo por la cintura y ambos se mueven al ritmo de la música... ¿Así bailan los amigos? Finn vuelve a mirar a su acompañante, ¿es posible que Jack sea su amigo? Finn está apunto de comprobarlo.

Se acerca a Jack por la espalda y lo abraza por la cintura. Jack da un brinco sorprendido y se voltea (aún atrapado entre los brazos de Finn) muy sonrojado.

—¿Q-Qué haces?— balbucea, con las palmad puestas sobre el pecho de Finn como guardando distancia.

Finn ladea la expresión, confundido.

—¿Podemos ser... amigos tú y yo?

Jack no entiende a que se refiere, pero antes de poder decir algo, ve tras la espalda de Finn a uno de sus guardaespaldas. Y lo peor, el tipo también ve.

—¡Aquí está!— grita a sus compañeros—. ¡El joven Grazer está aquí!

Jack entra en pánico. No, no pueden atraparlo. La noche no puede acabar así.

—¿Eres bueno corriendo?— pregunta Jack a Finn.

El guardaespaldas se acerca, empujando a las personas del público.