Universo Laberinto

Capítulo 15. La rebelión del guía.

Luego de que muriera en el combate el campeo vinieron muchas preguntas en mi mente ya que algunas cosas no coincidían, las pregunta se las hice directa al guía para sacarme de duda.

¿Por qué no llegaste antes y me hubieras ayudado desde el principio?

¿Por qué no muestras tu verdadero rostro?

¿Cómo fue que encontraste el último portal sin haber matado al campeón?

¿Por qué confió en ti sin saber quién eres?

¿Por qué me atacan los pensamientos de dudas y aun creo en ti?

Todas esas preguntas y muchas más venían a mi mente una y otra vez,  la duda se apodero de mis otras ves, fue algo parecido a la mujer del sueño en aquel jardín.

El guía se reía como un payaso maniático, fue algo espeluznante.

Él dijo: demuéstrame que tan fuerte eres y te diré toda la verdad.

Yo no entendí que me quiso decir con eso, entonces al verme confuso él se aventó a mi dándome un cabezazo en mi pecho, ese golpe saco el aire  de mis pulmones, fue tan fuerte que se escuchó hueco fuerte como el costalazo de un saco cuando se cae.

Me enoje con gran furor y rompí su capucha con mi espada, el esquivo el ataque di mi espada pero rompí su capucha.

Eh aquí que rompiera su capucha se transformó en mí, de la nada saco una oz oscura como de maldad y nos enfrentamos tontamente en el espacio mientras cruzábamos ese portal.

Fue una batalla donde no sé cómo saque tanta fuerza que hacíamos explosiones al tocar espada y oz,  esta batalla fue más poderosa que las batallas de los héroes del anime o de los héroes de los mangas y comics, sentí que éramos dioses en medio del vacío.

El guía tenia las de ganar porque en todo ese tiempo que duramos luchando (5 horas) mi fuerza se agotaron y el cansancio  se apoderaba de mi cuerpo.

El  tiro un ataque con su oz demoniaca con toda su fuerza con al intención de matarme; Pero mi ganas de sobrevivir hicieron que yo lanzara un ataque más fuerte destruyendo su oz y destruyendo mi propia espada.

Al destruir mi espada escuche la vos de esa mujer ( mi mama ) que me decía : - no desmayes sigue luchando tu recuperación esta cerca.

Entonces quedamos con nuestros brazos descubiertos dándonos golpes como niños de secundaria en una pelea callejera.

El guía también comenzó a sentirse algo cansado y el desvanecía al igual que yo, al dar el último golpe, ambos caímos pero yo fui el que di mi último golpe noqueando al guía el cual era muy idéntico a mí, era como luchar contra mí mismo.

Al finalizar por el viaje al portal caímos en otro lugar, oscuro y catastrófico, las únicas señales de luz eran de ruinas en llamas, esas llamas jamás se consumían o se apagaban.

Caímos en el lugar más alto de ese mundo o isla flotante y el ambiente era como de luto pero de una guerra que acababa de terminar.