Capítulo 17. Oscuridad y gusanos.

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Luego de aquella larga batalla con el guía, tras el cruce del portal a este mundo, me sentí algo cansado y dormí a la par del guía que estaba desmayado. No me importo que  tenebroso era ese lugar ahí dormí almenas media hora.

A la hora de despertar vi que las hadas nos atendieron y con sus magias nos sanaron las heridas y nos dieron agua mágica para aumentar nuestras fuerzas, nos dieron una antorcha mágica a cada uno para caminar en ese mundo oscuro.

Luego de despertar el guía y yo tuvimos una discusión que al final de tal discusión termine aclarando algunas cosas y el por qué se había revelado, todo fue una prueba que tan fuerte era.

Luego de tal discusión me llevo a una cueva llamada el calabozo donde estaban todos los soldados derrotados de mis historias y de las historias que yo había leído.

Entramos al calabozo y lo primero que escuchaba en esa oscuridad eran como zumbidos de abejas así que apagamos las antorchas comunes y encendimos las mágicas lo cual nos mostraban con más claridad las cosas y eh aquí una gran pila de gusanos en todo alrededor de la cueva, aquello era asqueroso y olía  a carne podrida.

Le dije  que se convirtiera en el cuervo del desierto y la granja (el cuervo de una historia que escribí) y él lo hiso pero esta vez el cuervo era gigante y lo cabalgue hasta llegar a la profundad del calabozo donde habían muchos cuerpos en descomposición y estaban muertos, aquellos cuerpos estaban atados con cadenas como si tal se tratara de una cárcel.

Entre la multitud de muertos habían los que sobresalían, eran muertos vivientes y ellos eran los protagonistas de mi historia, entre ellos estaba el gladiador (el campeón del bosque) no entendí por qué él estaba aquí si se había suicidado en aquel lugar.

Al mirar que ellos estaban medio vivos observe que los gusanos estaban en todo sus cuerpos y medio  ganas de vomitar y vomite, era asquerosa tal cosa que no te lo recomendaría que lo vivieras.

Los protagonistas de mi Historia pidieron que los sacara (el calabozo) y la llave para todas las cadenas estaban en el dragón guardián y que luego nos enseñarían donde está el portal de salida de este mundo.

Entre todo esa putrefacción buscamos a dicho dragón y lo encontramos, ese dragón era joven pero también estaba agusanado y putrefacto, era mediado, tenía el suficiente tamaño para que lo enfrentáramos. En su cabeza dentro del cráneo estaba un orbe que alumbraba me imagino que eso era la llave.

Entonces enfrentamos y derrotamos el dragón fácilmente, le dije al guía que se convirtiera en una tormenta de hielo mientras yo buscaba un arma para matar a ese dragón.

Entre la putrefacción me hundí en los gusanos y tome prestado el mazo de un gladiador. Cuando volví donde estaba el dragón vi que el guía estaba congelado y también el dragón. Entonces desbarate la cabeza del dragón y obtuve el orbe que era la llave.

Luego de morir el dragón se desintegro y los gusanos también , solo quedaron los huesos de todo aquel que estaba muerto definitivamente en ese lugar, las cadenas se liberaron, y los muertos vivientes recobraron su apariencia.

Al volver donde los héroes de mis historias pedí ayuda para descongelar al guía y lo descongelaron.

Ellos me dijeron dónde estaba el portal y sus últimas palabras fueron:

- oh! Gran creador nos vemos al inicio de tu trono, pero primero mata a nuestros enemigos que nos han encarcelado pero, tus nos liberaste.

Oh gran señor, mata también al chinigami que va acabar con tu mundo y principalmente con tu vida.

Cruzamos el portal que nos llevaría otra tierra y tenemos una misión que de alguna rara manera tenemos que completar.

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