7. Intruso.

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Seguía con una sonrisa boba plasmada en el rostro hasta que tocaron la puerta en la que estaba apoyada.

—¿hija? Ya debemos ir a darle la buena noticia a la familia de Troy.—Se escuchó la voz de mi madre a travez de la madera.

—Un momento.—Contesté calmando mi expresión y abriendo la puerta.

Al abrirla por completo vi a mis dos padres en el pasillo.

—Vamos, ya está atardeciendo.—Ordenó mi padre.

Asentí silenciosamente y momentos después.

Me encontraba con mis padres nadando hacía el hogar de Carmín, al llegar encontramos a la pequeña de la familia en el frente de la recidencia.

Ésta al vernos salió nadando rápidamente a buscar a su madre.

—¡Mamá! la familia real viene hacía acá, de seguro nos darán noticias de mi hermano.—Comunicó Kira emocionada.

Al estar más cerca pude visualizar a la señora Carmín en la entrada de su casa, esperándonos pacientemente y estando cada vez más cerca sus ojeras eran más notorias.

—Buenas tardes eminencias ¿Qué se les ofrece?.—Cuestionó Carmín, haciendo una pequeña reverencia.

Se le notaba bastante deteriorada, pero eso era natural en nosotros al pasar por emociones tan desgarradoras.

—Buenas tardes señora, venimos a darles noticia de su hijo.—Tome la palabra antes que mis padres.

—¿Ya apareció?.—Preguntó con anhelo y emoción.

Casi instantaneamente su apariencia mejoró.

Pues sus ojos tenían de vuelta su brillo maternal habitual y su cuerpo dió la ilusión de haber recuperado fuerza.

—Sí, está en el castillo siendo atendido por un sanador.—Esta vez la que habló fue mi madre con una sonrisa genuina.

—¿Esta muy grave? ¿Podemos ir a visitarlo?.—Cuestionó apresurada.

—Calma, el está estable aunque no te mentiré está delicado y claro que lo pueden visitar es su hijo, cuando el sanador lo indique podrá regresar a su hogar.—Respondió mi padre.

—¡Gracias a Poseidón!.—Exclamó con alegría.—les agradezco todo lo que han hecho por mi familia.

—No debe de agradecer, somos pocos en nuestra especie. Debemos ayudarnos entre nosotros—Contestó mi madre con sabiduría.—, pero si nos disculpa, ya está oscureciendo y debemos volver antes de que anochezca por completo.

—Entiendo, vayan con cuidado sus majestades.—Con eso dicho realizó nuevamente una inclinación ante nosotros y entro a su hogar junto a su pequeña hija.

Nosotros nos dimos vuelta y emprendimos rumbo al palacio, íbamos cruzando por la plaza ya vacía, pues no era común estar afuera tan tarde.

Cuando a nuestra espalda algo pasó nadando con mucha rapidez.

Alertas nos dimos la vuelta y papá nos puso protectoramente detrás de él, nos colocamos espalda contra espalda los tres, tratando de ver a lo que sea que haya sido.

—¡Ahí!.—Mi madre señaló en dirección a un callejón donde se veía la silueta de alguien, nos acercamos rápido a ese lugar, mi padre fue el más rápido de los tres y logró atraparlo, esto se removía a más no poder.

Claramente era un tritón o eso parecía, sin embargo la forma en la que trataba de desahecerce de mi padre dió a entender que no pertenecía a nuestro clan.

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⏰ Última actualización: May 29, 2020 ⏰

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