BESO, SEXO O MUERTE - YOONMIN

Capítulo 4.

Jimin se abrochó la camisa mientras buscaba con la vista sus pantalones.

-¿Te vas? Creí que podrías quedarte hoy- Jimin miro sobre su hombro a la pelinegra que salía del baño solo con un muy pequeño conjunto de lencería.

-Sabes que nunca me quedo después - recogió sus pantalones y comenzó a ponérselos, sin volver a mirar.

-Lo sé, solo creí que podría pasar- Jimin la miró de nuevo preguntándose porque creería que era especial de alguna manera- ¿sabes? He estado pensando que podríamos ser exclusivos y eso. Sería bueno para ti, así te quitarías a todas esas arrastradas de encima

-Seohyun creo que hay algo que has malentendido. Ya te lo había dicho, esto es solo sexo y no hay exclusividad, tengo sexo con varias por si no lo recuerdas, fui bastante claro al respecto

-Pero yo soy tu favorita, contactas conmigo más que con las demás, soy mejor que cualquiera de ellas.- se acercó a el tomándolo de la camisa

-No eres mejor que nadie, ¿Por qué te comparas con ellas? Sabes que olvidalo, esta fue la última vez- se deshizo del agarre- Y ¿sabes? ellas son mujeres igual que tu, no deberías de menospreciarlas, si hay alguien en el mundo que te entenderá perfectamente y te dará la mano es una, no un hombre estúpido como yo que solo ve en ti sexo- dicho eso salió del departamento de Seohyun.

Había ido con la idea de distraerse, pero no resultó bien. Llevaba días pensando sobre ello, y estaba bastante estresado, Min le había dado unos días para que pensara en sus opciones, mientras lo besara una vez al día no sufriría de ansiedad. Aunque había sido recomendación de Yoongi y no porque tuviera muchas ganas "Deberías relajarte, ¿Por qué no tienes un poco de sexo? Te ayudaría a pensar". Sin embargo no había sido muy aclarador. Las mismas dudas seguían en su cabeza.

Y es que ¿como podía decidir algo como eso?
Yoongi había dicho que no le importaría morir porque no tenía algo como un sueño o aspiración que cumplir, no es que fuera suicida o algo así, solo que no quería que alguien se perdiera la oportunidad de vivir por su condición. Pero si elegía esa opción su consciencia no lo dejaría en paz, después de todo era su culpa que estuvieran en esa situación, además el tampoco tenía algo así como un sueño o aspiración, por lo que sacrificar la vida de Yoongi por vivir de manera mediocre y sin propósito era algo que le revolvía el estómago.

Por otro lado podría simplemente morir. No habían sueños que alcanzar o una familia que lo esperara, tampoco tenía amigos de los cuales despedirse. Todos sus amigos o amigas al final querían meterse en sus pantalones o buscaban estar con el para conseguir la atención de alguien, o peor terminaban odiándolo porque de quienes estaban enamorados los rechazaron por que quien les gustaba era el. Lo sabía la atracción que generaba en los demás era mas una maldición que otra cosa. Pero aun así Yoongi, quien apreciaba tanto la vida humana, no se perdonaría si un humano muriera por su condición de íncubo. Lo supo en el momento que le dijo el porque prefería morir, su voz fue plana y su rostro parecía aburrido, pero sus ojos mostraron desprecio hacia su propia naturaleza. Si el elegía morir Yoongi lo respetaría, pero su autodesprecio crecería, por eso había evitado a toda costa tener aunque sea una víctima.

Sin embargo, la tercera opción era la más crítica, por una simple razón se unirían sin amor. El emparejamiento era como el matrimonio para los de su especie, era un ritual sagrado. Y el mancillaría sus creencias y rituales, no solo eso, si más adelante Yoongi se enamoraba, no podría tener una relación con esa persona pues su cuerpo rechazaría incluso un beso, también aplicaba para el, pero dudaba que alguien lo viera mas allá que un pedazo de carne, en cambio Yoongi tenía todo por perder.

Realmente debió de rechazar la apuesta de Ji Hyuk.
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Observó a Yoongi saliendo de la cafetería del campus, caminó a su banca. Jimin se acercó antes de que empezara a leer, no lo quería interrumpir.

-Hola Jimin ¿sucede algo?- Yoongi dejó su libro de lado

-Tome una decisión... Emparejemonos- Yoongi se vio sorprendido, más no molesto o desilusionado

-¿Estas seguro Jimin? Tu no podrás

-Me preocupa más que tu no puedas estar con la persona de la que te enamores- lo interrumpió, para ser sincero lo turbaba un poco la preocupación que mostraba Yoongi en su bienestar y comodidad. Solo sus padres se habían comportando así con el, y de eso habían pasado mas de 3 años.

-No digas cosas así o me voy a enamorar de ti y no podre quejarme después de nuestro emparejamiento - Jimin realmente comenzaba a pensar que Yoongi era más gato que otra cosa- Entonces, tendrás que prepararte