Luna y Sol se miran a los ojos. Caroline se ha quedado con Matteo en las hamacas mientras que con Ruggero estamos aquí con las dos niñas que no han parado de pelear en dos días.
-Discúlpate, Sol.
-No quelo.
Sol ha estado insoportable, en todo encontraba el problema y le echaba la culpa a Luna. Ruggero y yo estamos algo cansados, está bien que sea solo una niña, pero si no se comporta desde ahora, cuando sea grande nos volverá locos. Aparte, Luna se queda callada y no le dice nada, siendo que debería defenderse.
Situación 1:
Luna me pide que le haga dos coletas, es su peinado favorito y le queda hermosamente tierno. Sol empieza a gritar porque ella tiene dos trenzas y quería dos coletas. Me ha pedido que le haga dos trenzas, pensé que le gustaban y se las he hecho. Sol le grita a Luna, Luna llora, Matteo ve todo y sale corriendo. Ahora tengo a Luna llorando y a Sol gritando cosas sin sentido.
-Ven aquí, Sol, ven aquí.
-Ya no quelo do coleta.
-¿Entonces qué quieres?
-Que Luna deje de copiarme todo.
Bufo aburrida mientras veo como Luna se frota los ojos con las manos. Sol ahora llora y se abraza a una de mis piernas mientras mira a Luna.
Situación 2:
Matteo y Luna construyen un castillo de arena con Ruggero. Vengo llegando del mar con Sol en brazos, se está congelando porque el agua está helada. Me siento al lado de Ruggero y él me sonríe tiernamente, Sol me abraza y deja caer su cabeza en mi hombro.
-Oh, ¿Quién ha hecho esto tan hermoso?
Sol alza la cabeza y gira para ver el castillo.
-E feo.
-No es feo, Sol –dice Matteo frunciendo el ceño.
-Si e feo, Matteo. –Se muerde la uña.
Luna hace un piquito con la boca y luego se encoge de hombros. Le sonrío y ella me devuelve la sonrisa. Sol se baja y amaga a pisar el castillo de sus hermanos, Ruggero la quita de en medio y la aleja del castillo.
-No seas mala, Sol.
-¿Po que yo no pedo contuir un catillo con papi?
-Si puedes, princesa. Solo que estabas jugando con mami en el agua.
-E feo.
-No es feo –le grita Matteo.
-¡Si e feo, tonto!
-Matteo no e tonto –grita Luna.
Luna es fulminada por la mirada de Sol y a continuación tira uno de los baldes sobre el castillo. Me pongo de pie enojada y tomo a Sol en brazos para alejarla de sus hermanos. Luna y Matteo lloran por el castillo destruido.
Situación 3:
Hemos salido de compras, Ruggero tiene a los tres niños entusiasmados y les ha prometido que podemos llevar todo lo que ellos quieran.
-Ete vetido rosa me guta muto, papi.
-A mi tamben –dice Sol.
Y aquí vamos nuevamente.
-Mami, yo quiero una remera con un auto rojo –dice Matteo.
Ruggero tiene a las dos niñas de la mano y yo voy con Matteo que todo lo quiere con autos de carrera o monstruos gigantes. Mi esposo me mira y frunce el ceño. Tenemos pelea nuevamente, Sol y Luna quieren el mismo vestido.
-Podemos llevar uno para cada una.
-Yo lo vi pimero –dice Sol.
Luna hace morros y sus ojos se llenan de lágrimas.
-No e vedad, Sol.
-Si e vedad –le saca la lengua.
[...]
-No quiero que vuelvas a tirarle del cabello a tu hermana, ¿Has entendido?
-Ella empetó –grita enojada.
-No grites, Sol –la regaña Ruggero.
Luna está llorando y Sol amaga a hacerlo también. Hemos soportado muchos días con estás dos niñas así y ya es el colmo, son hermanas, tienen que por lo menos llevarse un poco bien. Sí, todos los hermanos pelean, pero Sol por todo hace llorar a Luna.
-Yo solo le quise sacudir el cabello.
-Me lo tirate, Luna.
-No, Sol.
-Si lo hiciste.
Ruggero frunce el ceño. Está notoriamente cansado e irritado.
-No discutan. Vamos a hacer así de simple, les digo a las dos, pero tú eres la más problemática, Sol. No quiero más peleas, a la primera pelea nos volvemos a casa. No más playa, no más juguetes y no van a ver televisión por un mes. Así que, sin peleas o después todo será feo.
-Por culpa de Luna –agrega Sol.
-Sol, escúchame, no estoy bromeando, hija. ¿Quieres volver a casa? ¿No más playa?
Sol niega con la cabeza y su corto cabello se sacude. Ruggero me mira para ver si estoy de acuerdo y asiento levemente. Creo que con eso se van a calmar un poco. Las dos se quedan calladas por unos minutos, luego Luna se atreve a alzar la mirada y hablarle a Ruggero.
-Hay mutos niños que tenen tencitas en la cabeza, ¿Pedemos tener una?
-¿Qué tienen?
-¿Trencitas, Lu?
Ella asiente energéticamente mientras se muerde el labio.
-Si, tienen con cositas de colores y mutos hilos divertidos.
Ruggero abre los ojos. Si, él también lo recuerda.
-¿Quieren hacerse trencitas?
-Si, yo quelo –dice Sol-. Y tamben de eso coso que se borran despes.
-¿Qué? –Alzo una ceja.
-¿Le epico yo? –Le pregunta Luna a Sol.
Sol asiente energéticamente y Luna le sonríe con ternura.
-Son como lo tatuaje, peto se van una ve.
Bien, mis hijas han salido a mí.
-Oh, claro que podemos hacer de esas dos cosas –digo y me pongo de pie.
-No, no podemos –Ruggero se pone de pie también.
-Si podemos, Ruggero. Ellas quieren, podemos dárselo.
-Esto vamos a hablarlo tú y yo esta noche. Las haz convencido, Karol. Son como una Karol salvaje de pequeña.
Me río divertida mientras él me toma la mano. Luna corre a abrazar la pierna de Ruggero, y Sol los mira desde su lugar, así que suelto la mano de mi esposo y me inclinó, y abro los brazos en dirección a Sol. "Ven aquí" articulo en silencio. Ella me sonríe y corre hacia mí.
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[2] La Bella y La Bestia » Ruggarol [Adaptada]
FanficMatteo, Sol y Luna, serán como sus padres. Sus cualidades complementadas, harán crecer a esos tres hermosos niños, con parecidos a su madre y a su padre. Los ojos de Ruggero, la sonrisa de Karol. Descubre la nueva etapa de la vida de Karol y Ruggero...