Me sentía nerviosa por anunciar mi compromiso con Conner. También estaba muy ansiosa, claro, tenía la felicidad a mil de por fin confesarles el día de hoy que me casaré con él. Estábamos todos reunidos en la terraza del edificio, había decorado-con ayuda de Abril y Carolina-, cada rincón del lugar para que ésta noche sea una muy bonita velada. Ésta noche estaba la familia completa y me sentía muy feliz por tenerlos a mi alrededor.
Observé a Conner de reojo y sonreí al verlo charlar animadamente con André, el novio de Abril que se había integrado a nosotros muy rápido. Llevaban un mes saliendo oficialmente y parecía que les iba muy bien. Tomé la mano de Conner por debajo de la mesa y le lancé aquella mirada que decía todo. Era hora. Nos levantamos juntos tomados de la mano y con nuestras copas y un utensilio hicimos ruido.
—Disculpen—digo, soltando una risita—, O'Conner y yo tenemos algo que decirles.
Mi mamá gritó.
—¡Los nombres de los bebés!
Reí.
—No—negué—. Conner me ha pedido matrimonio. Y acepté, hace dos meses. Hemos decidido llevar a cabo todo los planes de la boda antes que nazcan los bebés.
Hubo un alboroto de gritos felices.
—¡Eso es increíblemente genial! ¡Ya era hora!—exclama Carolina y intenta abrazarme con cuidado por mi estómago que ya está más abultado de lo normal, parecía que tuviera cinco o seis meses, cuando en realidad tengo apenas tres y la próxima semana cuatro.
Las felicitaciones llegan, los abrazos, los besos y la alegría. Mi padre, me abrazó con mucho amor e incluso derramó lágrimas por mí, ni mi mamá hizo semejante acto tan tierno. Pasamos una noche tranquila, divertida, recordando y contando anécdotas,conociéndonos aún más y sobre todo disfrutando en familia. Realmente éste era mi sueño realidad, estar con el hombre que me ame tanto cómo yo le ame a él, mi familia completa junta, su familia también, todo.
Y está pasando.
La felicidad resalta en mí.
Soy una mujer feliz. Y seré aún más feliz en tener a mis pequeños en mis brazos.
Tres meses después.
—Ese vestido es hermoso—halagó mi mamá.
Estábamos justo ahora en la tienda más famosa de vestidos se bodas de New Orleans. Estaba mi mamá, Abril y Carolina, mis damas de honor, las tres. Fruncí el ceño cuando nuevamente mi mamá me dijo que el vestido se veía muy bien en mí.
Me seguí observando en el espejo. No estaba muy segura. El vestido era tipo sirena, con una cola larga, tenía escote de corazón, las piedras de diamantes, no tenía mangas y me gustaba, sí, pero me sentía totalmente una ballena con él. Mi estómago se veía raro en el vestido y hacía que cambiara cada dos por tres de vestido. Necesitaba encontrar el adecuado.
—¡Estás realmente preciosa!—escucho que dice mi hermana, subiendo a dónde estoy—. Esa panza tan hermosa que tienes, te hace ver espectacular Annelisse,no te acomplejes.
—Siento que ningún vestido se acopla a mi estómago—me quejé.
—¿Sabes qué? Encontraré el vestido perfecto para ti.
Desapareció con la muchacha que me atendía. Mi hermana sabía lo que me gustaba y lo que en éste momento necesitaba así que confiaba en ella. Mientras ella buscaba algún vestido yo me senté, los pies me mataban y la espalda me dolía. Cada vez más me sentía cansada y floja, muy perezosa y lo que hacía era comer y dormir. De vez en cuando con ayuda de Abril y Caro nos poníamos a hornear postres, pero más que todo me la pasaba en cama y eso era algo debido al embarazo.
Conner me dice todos los días que parezco un oso invernando.
—Estoy muy orgullosa de ti—murmulla mi mamá—. Me siento realmente feliz por ti.
Los ojos me lagrimean.
—Gracias mamá—la abrazo.
Intento luchar por no llorar y lo logro.
El abrazo de mi madre hace que me sienta en casa y en paz.
—¡Lo tengo!
—Al fin—exclama Abril soltando el teléfono—. Te acompaño a ponértelo.
Asiento.
El vestido está envuelto en una bolsa negra por la cuál no puedo observar cómo es. Me meto en el cubículo y con ayuda de Abril me quito el que tenía puesto con cuidado y lo doblamos y ponemos en su lugar. Ella hace que me dé la vuelta y escucho rasgar la bolsa.
—Mierda—dice—. Es precioso.
Me volteé.
A simple mirarlo, quise ponérmelo ya. Parecía ser un vestido de princesa, pero sin tanta tela. Era más entre sirena y relleno, tenía piedras doradas a los lados que resaltaban, diamantes en el escote de corazón también y mucha pedrería brillante. Me gustaba a la simple vista. Era muy hermoso.
—Bueno, ya, ya,vamos a probártelo.
Minutos después, salí.
Mi mamá se quedó boquiabierta de sólo salir, al igual que Carolina.
Me miré en el espejo y simplemente dije:
—Éste es.
—¡Claro que es! Te queda espectacular—pronuncia Carolina con entusiasmo—. Es que lo sabía, ¿ves? Soy la mejor.
—Estás hermosa_me halaga de otro lado Abril, abrazando mi hombro—. Te queda perfecto. Eres la prometida más bella que he visto.
Me río.
Y de la risa vienen las lágrimas.
Malditas hormonas.
—¡Mi niña ya no es una niña!—lloriquea mi madre al llegar a mí—. Te ves preciosa hija mía. Ese hombre morirá en el altar de tan sólo verte. Es muy afortunado en tenerte.
Luego de eso, salimos a comer a un restaurante chino. Le dejé un mensaje a Conner diciéndole que había conseguido el vestido y también le pregunté si se compró el esmoquin.
—Tengo una idea maravillosa de dónde podríamos hacer la despedida de soltera—farfulla Abril con tono sospechoso y la miro entre cerrando mis ojos—. ¡No! En las Vegas no. ¡Francia!
—¿Francia?
Hola mis bellas fresas❣ espero les guste este capítulo y disfruten.
Déjenme informarles que me ha dado gripe(gripa, resfriado) y ando mal de la tos, muy mal:( pero aún así hice mi esfuerzo en subirles capítulo, osiosi. Tal vez si mañana amanezco mejor, intento subir el capítulo 30.
También depende de mis ánimos, porque-se va a salir de onda la cosa porque les hablaré de algo personal-, hace dos días tuve una discusión con mi novio y me terminó bloqueando de WhatsApp y de los mensajes por messenger, pensé que todo había terminado por la manera en que escribió un mensaje, así que no fue así, también que tenemos muchos problemas debido a la distancia, sólo nos vemos en el liceo(escuela, secundaria) por motivos familiares.
Es muy fuerte para mí la verdad porque sufro de depresión. No constante pero sí de vez en cuándo, por eso aveces pido paciencia conmigo kskjsjdksjsjs💓
Bueno, es todo, espero que les guste el capítulo, yo lo amé. Los amo muchísimo, gracias por todo, sus votos, sus comentarios hermosos, su apoyo, todo💘 ya somos 16K❣❣❣❣❣
Nos vemos mis amores 💘💘💘
Capítulo dedicado a:
@NIDIANA80
@Zulyvazz
@MaryEscobar478
Espero les guste y disfruten el capítulo, los amo.
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Secretaria del sexo©
RomanceMiré cada paso que daba aquella mujer que me traía loco sexualmente. Había soñado con ella múltiples veces teniendo sexo, era increíblemente excitante. Y ella estaba al tanto. Quería proponerle sexo entre nosotros nada más, pero no buscaba las pala...