Capítulo 4

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Ataque.

- Quiero que los arqueros estén sobre la muralla inmediatamente, tienen que reducir a la mayor cantidad de guerreros enemigos posibles - ordenó el Rey mientras se quitaba su capa y se disponía a tomar su espada de hierro -

- ¡Ya escucharon al Rey! - gritó Mike apareciendo entre la multitud con su traje de batalla puesto, junto a su espada de hierro deslumbrante - ¡Escuderos, al frente! Los demás estaremos detrás esperando la orden del Rey para atacar - anunció mientras alzaba su espada hacia la puerta de las murallas -

Los guardias corrieron acatando la orden del Rey y líder de la guardia, preparando sus formaciones y armas en el camino, si fallaban, el pueblo estaría en peligro. Los habitantes ya se encontraban en el refugio, cinco guardias están con ellos por más seguridad.

El pelinegro y el castaño subieron a las murallas, tomando el frente mientras esperaban a que todos se prepararán; varios guerreros en formación se encontraban fuera del reino, posiblemente en espera de alguna orden dada por el comandante, al cual no veían por ningún lado.

Mike y Trollino se miraron entre sí por unos instantes, antes de que el último mencionado tomará aire antes de hablar.

- ¿¡A que se debe la presencia de los guerreros del Reino del Sur!? - gritó fuerte y claro, siendo impotente para evitar revelar alguna debilidad ante el enemigo -

De entre los guerreros de uno de los reinos vecinos, alguien diferente surgió, portaba un casco adornado por plumajes rojizos que resaltaban sin duda alguna; su espada de hierro era alzada hacía el Rey y eso solo alertó a los arqueros.

El Rey Trollino alzó su mano para tranquilizar a sus tropas, indicándoles que todo estaba bien por ahora, lo que funcionó para todos menos para Mike, quien se mantenía alerta aún y miraba de forma severa al que parecía ser, el Rey del Reino ubicado en el Sur.

- ¡Si el Reino del Norte no se rinde ahora mismo, atacaremos y destruiremos todo en su Reino hasta que solo queden sus miserables cenizas - amenazo gravemente mientras sonreía con superioridad - Únanse a los Reinos del Sur y del Oeste, no sigan los pasos del Reino del Este, el cual fue reducido a polvo lamentablemente... -

Mike pudo notar la tensión en el cuerpo de su Rey, sabia que no había tomado bien la noticia sobre el fin del Reino del Este, el cual seria un fuerte aliado contra los Reinos enemigos, pero eso ya no será posible ahora.

- ¡Lamentó informarles que el Reino del Norte rechaza su oferta! - se negó a rendirse, alzando su mano para que fuera vista por todas sus tropas - ¡Prepárense! -

Inmediatamente los arqueros tomaron sus flechas y las ubicaron en el arco, apuntando a los enemigos, los escuderos colocaron frente suya los escudos, mientras los guerreros preparaban sus espadas para embestir a cualquier enemigo que quisiera dañar a su Reino.

Mike guardó su espada y sacó su arco, tomando una flecha para unirse a los arqueros momentáneamente, al menos para ayudar desde la lejanía, pues no podía dejar a su Rey solo sin protección.

- Tu lo quisiste de está manera... - murmuró el Rey de casco con plumaje rojizo - Ataquen mis súbditos - ordenó con malicia, abriendo sus brazos como si quisiera abrazar el infierno propio que se avecina, todo esto mientras sus tropas le adelantaban para atacar -

- ¡Disparen! - ordenó el Rey Trollino, mirando como miles de flechas eran disparadas rápidamente -

Apretó con fuerza su centro Real, golpeando éste contra el suelo dos veces, provocando que el rubí brillará con intensidad y una onda expansiva roja hiciera acto de presencia. Mike sonrió sin dejar de disparar, pues su Rey había utilizado por primera vez la magia del centro Real y le había salido a la perfección.

King | MikellinoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora