Heredera Del Infierno

Capitulo 1

Tengo los ojos vendados no recuerdo nada, estoy sentada en una silla con mis manos y pies atados escucho unas voces, me quitaron la venda y mis ojos poco a poco se fueron adaptando a la luz, pude ver las siluetas de las personas que me tenían atada, tenía mucho miedo ¿quiénes son y porque me haces esto? ¿me van a lastimar? Quiero ir a mi casa, con mi familia y que esto sea solo una pesadilla y que en cualquier momento despertare, pero lo que logre ver me aterrorizó aún más ¡era mi padre!

Mis lágrimas amenazaban con salir no puedo creer mi padre ¿por qué me haría algo así? Y entonces me dijo algo que no comprendí.

- Te ha llegado la hora monstruo, es la hora de que te vayas al infierno con esos demonios- y una sonrisa malvada se le dibujó en el rostro y mi corazón se rompió en mil pedazos, porque me decía eso yo no soy un monstruo.

- ¡Papá! No sé de qué me hablas ¿porque me haces esto?- mi voz salió ahogada por el llanto, la desesperación y mi tristeza.

- ¡Callate! Tu no eres mi hija, eres un monstruo y tu por ser mi primogénita tienes el gen demoníaco y es nuestro deber eliminarlos a ustedes para que no hagan daño a los humanos.

Y en ese momento saco de su empuñadura una espada, le vertió un líquido y esta se envolvió en una llama azul y en cuestión de segundos mi propio padre me atravesó justo en donde se encuentra mi corazón mientras veía su cara llena de orgullo por su hazaña, la sangre brotaba por mi boca y sentía como todo mi cuerpo se adormecida y cayó en una oscuridad, una voz le gritaba.

- ¡Darice, ayúdame por favor! Ten cuidado con nuestro padre, aléjate de él lo único que quiere es matarte porque eres especial y creyó que era yo, pero salvate y ten cuidado por favor pronto sabrás tu verdadero ser...- y la voz se hacía cada vez más lejana.

   Me desperté de un brico y con mi corazón latiendome a mil, desde que murió Layla tengo el mismo sueño aunque este ha sido más largo que los otros, siempre me da la misma advertencia sobre nuestro padre.

  Observo el reloj que está al lado de mi cama y veo que son las cinco de la mañana, todavía es muy temprano para ir a la universidad, pero no creo que pueda volver a dormir más y me dirijo a la ducha siento como el agua tibia me cae por la espalda mientras vuelvo a recordar el sueño, esta vez fue diferente es como si fuera yo la que paso eso y tal vez sea solo mi subconsciente jugándose una mala pasada, pero es como si una parte de mi sintiera que eso fue real, y después cuando me dijo que pronto descubriría mi verdadero ser me dejo aun más confundida, pero lo dejo pasar igual son solo sueños.

  Me vestí con mis típicos jeans negros, un crop top blanco y mis botines negros de tacón favoritos, ya lista bajo a desayunar y como siempre mi padre no está y siento que es mejor así, no se como actuar con él me siento incómoda y me he alejado de él (de todos en realidad), mi madre está haciendo el desayuno y en su rostro se refleja el cansancio y la tristeza por la muerte de Layla.

  Ella era la mejor hermana de todas, siempre se preocupaba por todos en la casa, era ese tipo de personas que cuando estas cerca no puedes dejar de sonreír y sientes esa vibra que hace que estés feliz, pero murió hace una semana nadie sabe el porqué lo hicieron ni quien lo hizo, volví a pensar en él sueño y tal vez sea porque Layla y mi padre no eran muy cercanos, no le he dicho a nadie sobre mis sueños ya que empezaran a tener lástima de mi y decir "es completamente normal que sueñes con ella, todavía es muy reciente y eran muy cercanas" y todo eso de lo cual no creo que todas las personas sean sinceras al darme sus condolencias, me siento en la mesa y cuando estoy por terminar mi desayuno mi celular comienza a vibrar dentro de mi bolso y vi que era un mensaje de mi mejor amiga Antonella.

- ¿Darice vas a venir a la universidad hoy?, me han dicho que tenemos un compañero nuevo, espero que sea guapo- no logró controlar mi sonrisa, Antonella es una chica muy guapa y siempre anda en busca de su príncipe azul, pero se termina enamorando del príncipe equivocado.

- Si voy a ir a la universidad, tu siempre andando detrás de los chicos- y con eso guarde mi celular en mi bolso.

  Termine de retocar mi maquillaje y me dirigí a la cochera para sacar la Benelli 302r, a mi hermana no le gustaba que la condujera creía que iba a tener algún accidente o algo así, pero yo nunca le hice caso, me subí y me encamine hacia la universidad. Era la misma rutina desde que murió Layla todo se veía más apagado y yo dejé de hablar con las personas y mi padre creía que me había vuelto rebelde, hasta he empezado a fumar, pero ya no me interesa lo que digan de mi.

  Aparque en el lugar para motos y en ese instante llegó una y aparcó a mi lado un Susuki GSX-S 1000F no la había visto jamás y entonces pensé que podría ser el chico nuevo del que me hablo Antonella, nuestras miradas se cruzaron y pude ver unos ojos cafés que se veían entre el casco de color negro mate, al instante aparte la mirada, me quité el casco y me dirigí a la entrada de la universidad donde me estaba esperando Antonella, después de un abrazo afectuoso fuimos a nuestra primera clase.

  A los minutos entro un chico muy guapo, todas las chicas se quedaron boquiabiertas cuando entro aquel moreno con un cuerpo bien trabajo y cabello oscuro, pero yo no estaba tan impresionada aunque si estaba muy guapo pero no era nada del otro mundo, llevaba una chaqueta de cuero negro que lo hacía ver maduro y a la vez malo, nuestras miradas chocaron y no pude evitar reconocer esos ojos negros era el mismo chico del estacionamiento, y mi amiga al ver nuestro contacto visual me dio una sonrisa pervertida, típico de ella.

-¡WOW! Es muy guapo, y al parecer ya te hecho el ojo a ti he Darice- me dice con su sonrisa pervertida todavía en la cara, pero ella sabe que no quiero tener ninguna relación amorosa, aunque también podemos llegar a ser solo amigos.

- No creo que sea como tu crees Antonella, tal vez solo estaba viendo a sus nuevos compañeros y listo- sabiendo que eso no iba a convencer a mi amiga.

- Pero se te quedo viendo a los ojos eso es indicio de algo... - justo cuando iba a decir algo más el profesor de matemáticas la interrumpió y entró al aula anunciando el comienzo de un día aburrido en la universidad, y presentando al chico nuevo que tiene a todas las chicas babeando por él.

- Buenos días a todos, espero que hayan tenido un buen fin de semana, como se han dado cuenta tienen un compañero nuevo, su nombre es Luka y viene desde Italia por favor todos sean amables con él y empecemos la clase.

El profesor empieza a explicar algo que no entiendo, al parecer mi cabeza no quiere abandonar el sueño de está mañana, es imposible que mi padre haya hecho algo así después de todo Layla es su hija, son solo delirios míos tal vez sea hora de superar la muerte de su hermana, volví a ver hacia donde estaba Luka y este me estaba observando y por un momento no pude apartar la mirada esos ojos cafés eran tan hipnóticos él sonrió de lado y volví a prestarle atención a lo que decía el profesor, no me podía dar el lujo de reprobar mate.