XXX. to home #1.

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Solo iba, venía y regresaba en todo. Y sí, estaba luchando contra mi depresión.

Dong Hyuck estaba con Woo Sung oficialmente. Odiaba cuando me volteaba a ver y luego se besaba con su chica, realmente aún no sabía como lograba detener las lágrimas.

Por otro lado, ese día iría a ver a Ren Jun, debía decirle gracias y explicarle que no soy un suicida.

Últimamente pensaba mucho en él, a tal grado que he llegado a pensar... no, nada de eso, Ren Jun no es mi tipo.

Quisiera mantenerlo cerca, me gustaría hacerlo como un amigo, incluso un mejor amigo si lo desea. Estaba de acuerdo con ello aunque últimamente ya no me coqueteaba como antes, no me ponía apodos, no es evidente pero supongo que ya no le gustaba y creo que eso estaba bien, ¿no?

Fui a dejar algo con una conocida de mi madre, su casa está al lado del Liceo Chino, no me había dado cuenta que las chicas y los chicos de ahí usaban uniforme.

Pantalones de cuadros negros, azules, grises, una camisa blanca con el logo de la institución y una corbata roja, con el cabello arreglado hacia atrás; caminé cerca de ahí, había poca gente afuera, seguro ellos no pierden pierden su tiempo y entran a todas sus clases.

Dos chicas pasaron frente a mí y me miraron de forma pícara, tsk.

No va a la escuela, ¿cierto?

Se detuvieron junto detrás de mí, esperando el autobús mientras yo miraba la entrada de la escuela, quiero ver a Ren Jun en uniforme.

─ No lo creo, no usa uniforme, ¿te gustó? Si es así, ve y habla con él.

─ No no, nada de eso, sabes que ya hay alguien que me trae loca.

¿De verdad las mujeres tienen ese tipo de conversaciones?

─ Ah unnie, ¿quién es?

─ Huang.

La piel se me puso de gallina; estaban hablando de Ren Jun...

No unnie no, ¡ese chico no! Vas a sufrir como perro callejero.

¿Qué?

─ ¿Por qué lo dices?

─ No eres su tipo, ya sabes... a él le gustan los chicos.

La chica suspiró. ─ Agh, rayos, ¿cómo lo supiste?

─ Todos lo saben, siempre está rodeado de chicos muy bonitos y es por eso, aunque últimamente ha estado bateando a todos.

─ ¿En serio?

Sí, un amigo mío que se junta con él dice que es porque ya está interesado en alguien.

Estaba como idiota escuchado la plática, tratando de disimular que espero el autobús o algo así. Y no lo veía salir...

─ Pues, que suertudo ese chi...

─ Shhh, hablando del rey de Roma.

Espera ¿REY DE ROMA? O sea...

Antes de girar mi cabeza... ─ ¿Min?

Estaba parado junto a mí, y sus amigos compraban algo en la tienda detrás.

R-Ren Jun, hola, qué sorpresa verte por aquí ─ fingí demencia sobre que hacía aquí.

¿Qué haces por aquí?

Vine a dejarle algo a mi tía y ahora espero el autobús ─ Natural... seeh.

Jajaja ¿ah sí? El autobús se toma para allá, pero ¿no prefieres qué te lleve en mi auto?

Lo pensé, toqué mi bolsillo y vi que no traía monedas para regresar a casa transporte público.

Bueno, solo por esta vez.

─ Bien, ven solo me despido de mis amigos, ¡oh! Y te presento, claro.

Caminamos hacia la tienda, las chicas que hablaban de él me miraban y murmuraban; luego me di cuenta que Ren Jun me estaba tomando de la mano, discretamente me solté para no crear más confusiones.

─ Chicos me voy, los veo mañana ¿sí?

─ ¡Adiós! ─ Hablaron al unísono pero un chico de cabellos naranjos, casi como un círculo y bastante apuesto se acercó.

¿Y de dónde sacaste a esta hermosura?

Me sonrojé y me puse nervioso.

Gra-gracias, mi nombre es Jae Min.

Todos me saludaron de manera cordial, en especial el chico de cabello naranjos con ojos bonitos y medios rasgados.

Un placer, soy Jung Woo, pero dime Snoopy, como mis amigos.

Me extendió la mano y la estreché.

Es amigo de mi hermano y lo conozco del café donde trabajo, que por cierto voy tarde, adiós ─ Dijo Ren Jun mientras me ponía la mano en mi hombro.

Adiós InJunnie, adiós Jae Min ─ volvieron a decir al unísono.

Caminamos hacia donde había dejado su carro.

Tus amigos se ven agradables ─ mencioné.

─ Lo son, también son raros, como yo.

─ Tú no eres raro ─ protesté.

Me miró y yo a él ─ Sí lo soy, pero trato de contenerme. ─ Se levantó de hombros.

Llegamos donde el vehículo, pero este tenía una multa y un seguro para que no se fuera; Ren Jun se había estacionado en parte de un lugar prohibido.

Aghhhh no puede ser ─ revisó su billetera.

¿Tampoco tienes para irte? ─ pregunté al verlo preocuparse.

No pero... ─ Me miró y cerró su billetera ─ no lo necesitamos.

Caminamos unas cuantas cuadras, ambos íbamos hablando a gusto, creo que debería decirle que el otro día no pensaba tir-

─ ¡AUCH! ─ Caí en un desnivel, me torcí el talón y dolía un poco.

¡Min! ¿Estás bien? ─ Me ayudó a levantarme, pero no podía apoyar mi pie derecho.

Al ver eso, Ren Jun se las arregló para cargarme en su espalda. Me sentí avergonzado por ese acto, pero agradecido.

Allá están los autobuses que van directamente hacia mi casa ─ Me dijo señalando una gran estación.

─ Pero estos cuestan más que todos los otros autobuses.

─ Nah, déjamelo a mí.

Recargué mi cabeza en él...

Al llegar, me sentó en la parada y me dejó ahí ─ Regreso en cinco con dos boletos... ya verás.

Se alejó, pero no mucho; vi como hablaba con el señor de la casilla, vi como movía las manos y como el señor reía... ¿qué cosa loca estás haciendo Huang Ren Jun?

Minutos después, regresó con una sonrisa triunfante, se puso de espaldas delante mío para que me subiera en él.

Ehh no, creo que ya puedo caminar un poco más.

Entonces me dio su mano para apoyarme en él.

Subimos al camión y tomamos asiento.

(...)

Crazy [ADAPTACIÓN] ➠ 'renmin' Donde viven las historias. Descúbrelo ahora