Crazy [ADAPTACIÓN] ➠ 'renmin'

special one. wedding.

Meses después - Boda de los padres de Ren Jun.

Aplaudí emocionado mientras sentía la mirada de Ren Jun sobre mí sonriendo con ternura. Estábamos en la esperada boda del padre de Ren Jun con la madre de Dong Hyuck.

Bajé mis manos y lo miré avergonzado. Durante los últimos meses que habíamos estado en Jilin, por algún motivo, me terminaba sintiendo avergonzado con solo su mirada tranquila.

Sonrió mientras agarraba mi cintura, en donde dejó leves caricias. Volví a mirar a los recién casados intentando evitar el hecho de que mi prometido estaba agarrándome posesivamente.

─ Junnie, debes comportarte ─ Susurré golpeando suavemente su mano cuando sentí que las caricias pasarían a mi piel.

─ ¿Comportarme? ¿Cómo quieres que lo logre si estás tan bonito así? ─ Besó mi mejilla y rápidamente me separé con las mejillas ardiendo en rojo.

[ ~ ]

Horas más tarde

El padre del peli-gris lo llamó para que bailase, él se negó afirmando no saber bailar ─ una gran mentira, por cierto ─ hasta que empecé a insistirle sacudiendo su brazo.

─ Vamos~ bailas muy bien~ ve y pasa un momen... ─ Agarró mi cintura y me arrastró a la pista en menos de dos minutos.

Sentí la mirada curiosa de algunos de sus familiares y algunos conocidos.

Lo miré con intención de oponerme a bailar, hasta que sus labios capturaron los míos, tomando una de mis manos para colocarla detrás de su nuca.

Quise no corresponder, porque si lo hacía iba a querer más y más. Pero no pude, correspondí sintiendo su mano entrelazarse con la mía mordiendo mi labio inferior de forma lenta.

Suspiré alejándome ─ Ren Jun...

─ Shh, bailemos ─ susurró acariciando mi cintura.

Empezó a moverse al compás lento de la música conmigo en brazos.

Intenté encontrar el ritmo mirando hacia abajo para seguirle. No era tan buen bailarín cuando se trataba de una balada, prefería moverme más a tener que dejar mi cuerpo moviéndose lento.

Bajé la mano que estaba en su nuca para aferrarme a su espalda mientras seguíamos dando vueltas en círculos llamando la atención de los presentes.

Acarició la mano donde tenía el anillo de compromiso. Sí, anillo de compromiso... Tal vez les cuente la historia en otra ocasión.

Las miradas lograron ponerme incómodo por las siguientes razones:
1─ Ren Jun terminó por dejar un enorme chupetón sabiendo perfectamente que al día siguiente sería la boda de sus padres en el hotel donde estábamos.

2─ Nos habíamos besado.

3─ Tanto Mark como Dong Hyuck estaban presentes y aún el azabache podía ponerme incómodo e inseguro.

4─ Nadie, a parte de sus padres y los anteriores mencionados, sabía la existencia de nuestra relación.

Era todo incómodo, pero subí la mirada para sentir que todo a nuestro alrededor dejaba de existir, solo nosotros dos en nuestro mundo.

Acercaba y se alejaba continuamente, provocándome grandes ganas de besarlo y dejarlo sin aire.

Cuando se acercó, aproveché qué se quedó embobado mirándome y empecé una danza en nuestros labios.

Él correspondió al instante y volvió a acariciar mi cintura. Me estremecí un poco suspirando en su boca, sacándole una sonrisa victoriosa.

Nos separamos por falta de aire y allí fue donde nos dimos cuenta de que la música había terminado hacía tiempo, se notaba que no prestamos la suficiente atención a nuestro alrededor.

Me separé sonrojado hasta las orejas y fue rápidamente a nuestra mesa intentando ocultar mi rostro totalmente rojo; lo sentía arder.

Me senté escuchando múltiples aplausos por parte de todos y no hacía nada más que agradecer con leves reverencias sosteniendo una sonrisa falsa.

Acomodé mi saco con la intención de mirar al peli-gris, sin embargo fue imposible el no hacerlo porque él se veía jodidamente bien en ese traje.

[ ~ ]

Suspiré después de haber escuchado a ambos casados y a sus respectivos hijos darles palabras de aliento ─ cabe recalcar que Ren Jun lo hizo un poco más serio, pero sin perder la gracia mientras Dong Hyuck intentaba sonar sincero ─, había bebido dos copas de vino y sentía que explotaba internamente.

Y cuando quería ir al baño, cierto chico me lo impidió tomándome entre brazos.

Me quejé para después sentir un camino de ósculos en mi nuca ─ ¡Ren Jun! ─ chillé.

─ Siempre yo, bebé ─ sentí su risa y luego su mentón en mi hombro. Sentí nuestros cuerpos unidos, sentí su respiración tranquila, sentí su calidez y sentí mi corazón salir de mi pecho.

Era una montaña rusa de emociones que él me causaba. Que ni en mis anteriores enamoramientos había sentido.

Por un momento pensé algo loco, pero que en mi cabeza parecía lógico. Él era mi pareja predestinada, mi media naranja, mi otra mitad.

Giré un poco el rostro y él aprovechó para rozar nuestras narices.

Mi corazón se aceleraba mucho más con apenas ese pequeño gesto...

─ Ren Jun... ─ no podía contenerme...

─ ¿Hmm?

─ Te a-amo ─ besé sus labios antes de separarme rápido.

Escuché su risa a lo lejos acompañado de un yo también te amo que, evidentemente, me hizo creer que tendría un paro cardíaco.

uwu.