Love Marks [HunHan]

M.

LuHan cayó dormido en los brazos de SeHun. SeHun observó sus delicadas facciones y sus bonitas curvas, pero lo que más le gustó fueron sus caderas. Podría considerarse raro, pero ver las curvas de sus caderas sólo le traía la imagen de un bonito LuHan con el vientre hinchado con su bebé.

Los rayos del sol acariciaban su rostro pálido y suave. SeHun tocó su barbilla con los dedos y delineó la figura con adoración. Jamás hubiera pensando que conocer a la otra mitad de su corazón sería tan agradable. Siempre había pensado que toda la cosa de las marcas era una forma de aprisionar a dos personas, obligarlas a tomar a alguien que ni siquiera conocían. Estaba totalmente en contra de esa regla, pero ahora... Ahora se sentía como una bendición, como un regalo.

Jackson los observó desde la ventana del salón, dentro de la casa. Se sentía celoso, pero no como se supone que debería. No quería salir y matar a SeHun por tocar lo que es suyo, no quería regañar a LuHan por tocar a otro. Sólo quería saber por qué el que se supone que era su marca, se veía más cómodo en los brazos de otro chico.

SeHun se quedó quieto, dejando que LuHan durmiera, hasta que su padre salió de la casa. —Es hora de entrar, hijo —se inclinó para palmear su hombro y le dio una sonrisa motivadora. —Todo estará bien, déjame todo a mí.

SeHun asintió, pero sabía que nada sería fácil o rápido. Sabía que tendría que luchar por un tiempo antes de tener a LuHan.

Movió el cuerpo de LuHan con suavidad y esperó pacientemente hasta que sus ojos avellana se abrieron con pereza. Cuando lo reconoció, LuHan sonrió feliz, sin recordar lo que pasaba en la realidad. SeHun también le sonrió y quitó algunos mechones de pelo de su frente antes de empujarlo lentamente hacia arriba. Su padre le ofreció a LuHan una mano para ayudarse, él sonrió con amabilidad antes de aceptarla.

—Gracias —susurró.

Su padre dejó caer su mano con delicadeza antes de alejarse para darles algo de espacio. —Es hora de que entremos —SeHun se sacudió la parte trasera de sus vaqueros, por si había quedado sucio.

LuHan se frotó el brazo sin saber qué decir. Tenía mucho miedo, pero también estaba emocionado. Sabía que al final, él sería entregado a SeHun, porque así era como debía ser. Incluso si todos lo trataban como a un simple objeto, si SeHun estaba con él, valdría la pena.

—Mi padre se ocupará de todo, ¿de acuerdo? No dejaré que te alejen de mí.

LuHan tragó con fuerza antes de seguirlo dentro de la casa. Su estómago empezaba a revolverse y las náuseas ligeras lo obligaron a tomar aire con fuerza. No quería vomitar en media reunión.

Su madre le tomó del brazo y le hizo sentarse a su lado. SeHun se sentó junto a su padre, pero nunca dejó de mirarlo. Jackson estuvo junto a sus padres también, pero parecía que había desarrollado un interés por la mesa, porque era lo único que veía.

—Bueno, lo primero que hemos decidido entre los adultos... —empezó el abogado Choi, de la familia de Jackson. —El abogado Oh no puede tomar este caso, porque se trata de su hijo, lo que puede ser un obstáculo moral.

SeHun se lo esperaba. Los abogados no tomaban casos que implicaran a su familia, y era entendible. Sólo quería saber cómo haría su padre para que todo saliera a su favor.

—Pero no hay porqué preocuparse —dijo el señor Oh —He llamado a un compañero, es un excelente abogado.

El abogado Choi continuó —Por supuesto, la familia Lu necesita un abogado aparte de mí. Cada familia es diferente en ciertos aspectos, sería diferente si Jackson y LuHan estuvieran casados ahora mismo.