Mientras Jackson se mantenía a un metro de LuHan cada día, SeHun ponía las manos sobre él cada segundo. Su madre estaba encubriendo lo que podría calificarse como un "pecado legal", pero ella sabía que su hijo necesitaba el contacto con LuHan.LuHan, por su parte, aceptaba las caricias de SeHun con gusto y rechazaba los intentos de Jackson con cortesía. Podía llegar a sentirse muy culpable al ver la decepción de Jackson, pero no podía obligarse a aceptar algo que no deseaba. Pero había algo que Jackson le daba y que LuHan aceptaba sin darse cuenta.
Los buenos momentos.
Jackson era un chico extremadamente divertido y amable. Había hecho que LuHan riera hasta dejarlo sin respirar en muchas ocasiones. Y lo mejor de todo eran las sonrisas sinceras que LuHan le brindaba. Para Jackson, una sonrisa contaba como mil caricias inocentes. No sabía cómo era para LuHan el tiempo con Oh SeHun, pero sabía que era diferente.
En cambio, SeHun se pasaba todo el día preguntándose si Jackson estaba acariciando o lanzando palabras dulces a su chico. Y cada noche, cuando estaba seguro que Jackson se había ido, le recordaba a LuHan lo mucho que significaba para él con un mensaje de texto y LuHan respondería casi de inmediato.
Después de dos semanas con la rutina, los abogados tenían una respuesta del juez a cargo de su caso. Las 3 familias se reunirían para hablar sobre ello y SeHun esperaba que esto pudiera resolver todo al fin. Esperaba buenas noticias y esperaba que las pruebas se hicieran en el menor tiempo posible, así mismo deseaba que la prueba fuera todo menos dolorosa para LuHan, aunque sabía que eso era casi imposible.
Su padre le había asegurado que todo estaría bien y que debía ser paciente y aceptar lo que venga con el único fin de tener a LuHan pronto. Aunque sabía que esas palabras probablemente habían sido usadas por el padre de Jackson también. SeHun estaba seguro de que LuHan no podía sentir a Jackson de ninguna manera, pero a él sí y eso era un buen presagio, pero nunca se podía estar demasiado seguro en este tipo de cosas.
Cuando el día llegó, SeHun se mantuvo apretando y soltando sus manos mientras se dirigían a la casa de Jackson. Había intercambiado un par de mensajes con LuHan la noche anterior y le había dicho que no se preocupara, que todo saldría bien. Su pequeño chico le había agradecido por sus palabras, pero no parecía tan convencido.
El día estaba gris y había un pronóstico de lluvia. Su madre siempre decía que el clima podía predecir cosas y aunque a SeHun siempre le había parecido ridículo, empezaba a preocuparse mientras veía las nubes grises cubrir el cielo.
Los elegantes coches de los otros dos abogados y la familia de LuHan estaban allí cuando la familia Oh llegó. SeHun se apresuró a salir del coche y acercarse a la puerta principal. El señor Wang ya los esperaba con una sonrisa forzada, pero SeHun simplemente pasó junto a él después de susurrar un "buenas tardes". Quería ver a LuHan antes de escuchar lo que tuvieran que decir.
Pasó por el salón, saludando a todos rápidamente y cayendo en la cuenta de que LuHan no estaba allí, al igual que Jackson. Aquello le molestó más que nada.
—LuHan y Jackson están en el jardín —dijo la señora Wang, probablemente viendo su desesperación mientras repasaba el salón con la mirada una y otra vez.
SeHun agradeció con una sonrisa y caminó rápidamente hacia la puerta de vidrio que llevaba al jardín. Buscando a LuHan incluso antes de tocar la puerta, vio a Jackson arrodillado frente a su chico mientras le mostraba un diente de león. Si SeHun pensaba que iba a explotar con ese simple gesto, casi se desmayó cuando LuHan empezó a soplar hacia la flor, haciendo que los pequeños dientes se fueran volando. Y Jackson, ese maldito imbécil empezó a soplar con LuHan también, como si se tratara de una estúpida película romántica.
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Love Marks [HunHan]
Fanfiction[TERMINADA Y PUBLICÁNDOSE] Cada bebé nace con una marca única que sólo otra persona en el mundo tiene. Aquella persona será tu otra mitad, tu amor verdadero. O al menos es lo que dicen. A LuHan le hace mucha ilusión encontrar a su otra mitad, pero...