Epílogo; Un sueño Interminable.Parte 2

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-Explícamelo- ahora mismo mi corazón se ha volcado y ha dado un giro de 180°C.

Oh Dios, siento la mirada desconcertada de Jimin sobre mí, mis manos sudan frío y una corriente recorre mi espalda junto con una gran punzada en el estómago cuando veo los labios de Jimin abrirse.

-¿Estas jodiendome?- mis ojos se hacen agua, su voz ha cambiado bruscamente.

-¿¡Quien coño te ha dicho que tomaras lo que no es tuyo!?- siento que me va golpear en cualquier momento, mi voz no sale, tan solo unos pocos murmullos entrecortados.

-Y-yo...- me siento sumisa ante sus gritos a pesar de ser el omega y yo beta.

-Papá...yo realme-- me interrumpe una voz que me odia con todo su ser.

-¡No, yo no soy tu maldito papá!, ¡no eres nada más que un producto de una jodida aberración!- oigo pasos acercándose de prisa mientras mi corazón se desvanece y mis lagrimas inundan mi rostro de manera exagerada.

-Papá, por favor, que díces...- jimin levanta su mano a punto de darme la cachetada de mi vida, pero una mano lo detiene.

-¿¡Qué demonios pasa aquí!?- Namjoon aparece por la puerta mientras Sangmin toma de las muñecas a Jimin forcejeando con él.

Inmediatamente corro por impulso y desesperadamente a los brazos de Papá Namjoon quien me recibe y me protege celosamente.

Mientras lloro en su pecho oigo las voces de los demás desvanecerse lentamente hasta que cierro mis ojos inundados y cansados.

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No obstante vuelven otra vez a abrirse, estoy calentita,esta vez en los brazos de Minseok, quien me sujeta con fuerza pero a la vez con delicadeza, no veo ni escucho nada, tampoco quiero hacerlo, me siento muy mal, y aún no he podido tragarme las palabras que Jimin me ha dicho.

Sinceramente no sé a qué se refería, pero si de algo estoy segura es que me ha roto el corazón.

-¿Estás despierta?- la dulce voz de Minseok interrumpe mis dolorosos pensamientos.

No respondo nada, simplemente me aferro a su pecho con fuerza, huele muy natural y sencillo, es agradable y acogedor, por ahora solo quisiera quedarme dormida en los brazos de alguien por siempre.

-Estás despierta...- ¿como lo supo?, con timidez levanto la cara y me encuentro con sus ojos, tienen un resplandor triste y azulejos, como un océano en tormenta.

-Desearía no estarlo...- mi voz se hizo un hilo cada vez más débil.

-No digas esas cosas- levantó mi mentón y miró fijamente mis labios.

-No me mires así, Minseok...- coloco mis manos en su nuca y la acarició suavemente mientras observo detenidamente su rostro tan hermoso.

-Por alguna razón no puedo detenerme- dice él aún con su voz dulce, como si de una hipnotización se tratara caigo ante esos ojos y sin darme cuenta nuestros rostros se acercan cada vez más, algo en mi me dice que me detenga, ¿Qué sentimientos tengo yo por Minseok?, ¿Merece dar mi primer beso de esta manera tan provocativa?, desde que éramos pequeños él siempre me dejaba atrás, era frío y malo conmigo, Sangmin era más añoñado y cariñoso, jugaba conmigo a las muñecas, ¿Debido a qué se debe este cambio tan radical?

En este momento mi corazón se derrite por tocar esos labios, pero mi conciencia me reclama, No es lo correcto, con las últimas fuerzas que me quedan retengo entre mis delgados dedos los labios de Minseok a centímetros de mí.

SOY IMPERFECTO »»NAMMIN««Donde viven las historias. Descúbrelo ahora