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Horas más tarde.

Entonces Romina me golpeó-.

Joaquín reía tras la anécdota.
-Igual y te lo merecías .

¿¡Qué!?, ¿¡neta Joaquín!? ¿¡apoyas a la bruja!?-.
Dijo indignado.

Joaquín sonrió.
-¿Debería apoyarte a ti?.

Obvio, yo soy tu amigo, no ella-.
El menor dejó escapar una pequeña risa.
Que lindo se escuchó eso-.

Las mejillas de Joaquín se encendieron al oírlo .
-¿Qu...qué?

¿Dije algo malo?-.

-N..no para nada.
Miró la hora.
-Cre... Creo que ya es tarde, hablamos mañana.

Emilio miró la hora en su celular.
-No manches, si si, descansa.

-Tú igual.
Iba a cortar, pero el mayor habló.

Espera Joaco-.

-Dime...

Solo quería que recordarás que mañana será un día muy especial-.

-Lo se, creo que no podré ni dormir por la ansiedad.

Cortando la llamada, cerró sus ojos, en realidad le temía al caer nuevamente.

-Solo amigos... ¿no?-.

Y es que lo que más deseaba el menor, era creérselo.

4 de Junio del 2018

El sol alumbro el rostro de Joaquín, haciendo a este bufar, tapando su rostro con las sábanas.

Entonces la llamada del día anterior pasó por su cabeza, sintiendo sus mejillas arder.

"Solo quiero hacerte feliz".

Al levantarse, corrió al baño, metiéndose a la ducha, dejó que el agua recorriera su cuerpo.

Después de terminar, se vistió, observándose al espejo.

-¿Que estoy haciendo? -.
Susurró.
-No.. Otra vez no Joaquín -.

-¿Otra vez que? -.
Dijo Renata de pronto, asustandolo.

-¡Renata! -.
Le gritó.
-Otra vez nada, no te metas en mi vida-.

-Ah~... Se trata de Emilio, ¿no? -.
Entró, sentándose a los pies de la cama.
-Se te nota tanto hermanito -.

Joaquín se quedó en completo silencio.
-Ya se me hace tarde -.
Tomó su mochila, bajando velozmente las escaleras.

-¿No vendrá Emilio por ti? -.

Y es que Joaquín hacía oídos sordos a las palabras de su hermana. Pero de nada sirvió salir tan rápido de casa, pues apenas se encontraba afuera, chocó con su rizado amigo.

-Ahg -.
Se quejó el mayor, sobando su cabeza.
-¿Estas bien Joaquín? -.

Las mejillas del menor estaban como pequeños tomates. Para hacer que éste reaccionara, Emilio tomó su mano.

Pequeño BondoniDonde viven las historias. Descúbrelo ahora