C A P Í T U L O O N C E.
Después de un buen rato estando pensativa, me percato de una figura que se aparece delante de mi rostro. Enfoco y me encuentro con una mano moviéndose de un lado a otro y a Noa con su rostro extrañado.Rápidamente parpadeo y niego con la cabeza, alejando todo pensamiento. Enfoco mi mirada en Noa y le sonrío.
—Oye, estás perdida. ¿Dónde es tu parada? —pregunta acomodándose de nuevo en su asiento.
Volteo a la ventana, ¡La parada! ¡LA PARADA!
—Eh... Yo... —tartamudeo, él voltea a verme gélido alzando una ceja.
¡Esto es muy intimidante!
<<Uuh, intimidada... >>
Nadie te preguntó.
Noa sigue esperando mi respuesta de brazos cruzados.
Rápidamente reacciono y me paro del asiento para alcanzar el botón que avisa la parada.
—Eh, verás. La parada fue... —él asiente seriamente para que continúe —Hace una atrás.
Abre los ojos sorprendido.
—¡¿Hace una parada atrás?!
Cierro los ojos y me encojo de hombros rápidamente para escuchar el sermón y el regaño, pero no escucho nada. En cambio, escucho unas mini risas.
Abro los ojos con temor. Me sorprendo al ver a Noa riendo por lo bajo.
—Eres demasiado distraída —menciona calmado, con sus ojos puestos sobre los míos— ven ya, apúrate que perderemos otra —me toma de la mano y se levanta del asiento, provocando levantarme a mi también.
Cabe recalcar que yo estaba al lado de la ventana.
Me dejo guiar por él y esperamos a que el tren pare.
Hice reír a Noa, ¡esto es sorprendente!
Debería ganarme un premio Nobel...
—¿Dónde es tu casa? —pregunta ya estando fuera del tren, mientras sus brazos posan en sus bolsillos.
Es cierto... Nunca le dije en donde queda.
—Ah, es en la residencia Chantelle —le digo mientras empezamos a caminar rumbo a mi casa.
—Espera, ¿esa no es la residencia más lujosa de la ciudad? —dice sin impresión alguna, con su mirada firme en la calle.
Seguramente quería simular un tono sorprendido. Aunque no le salió.
—Sí, digamos que sí. Aunque mi casa es la más pequeña de todas las que están ahí. El resto de las casas son como mansiones, es decir; ¡Son mansiones! —digo emocionada, recordando las increíbles casas dentro de la residencia.
Él ríe, aunque apenas escucho su risa.
—Increíble, debe ser lindo vivir ahí.
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A book behind you: A Star. ©
Romance☆ título antiguo: Detrás de un libro: Una estrella. Ella era lectora. Todos los días iba a la universidad con la cabeza metida en un libro diferente. A veces, sin querer, la encontrabas llorando en el tren, o riendo embobada mientras pasaba de hoja...