who's minho?

05

Dos golpesitos en la puerta de la habitacion 19 donde Minho estaba quedándose fueron suficientes para sacarlo de sus pensamientos.

—Permiso. —la doctora entró haciendo una semi reverencia. —Lee Minho? —preguntó ella para asegurarse de que no se equivocaba. —Cómo te encuentras?

—Roto. En mil pedazos. —respondió Lee.

—Mira Minho yo sé que es dificil esto, hay familias que pasan por cosas peores. Eres afortunado de aún conservar tu vida, creeme no todo está perdido. —habló la doctora Kim.

No entendia como su estúpido corazón no se rompía del todo de una vez para morirse y pedirle perdón a sus angelitos cuando esté en el más allá.

—Doctora yo... no puedo. —respondió Minho rompiendo en llanto. —Esto es mi culpa, si tan solo yo... —trató de formular la oración mientras lloraba.

—Minho está bien, lo hecho hecho está ya no hay vuelta atrás. Mírame. —dijo levantando el mentón de Minho encontrandose con sus ojos llenos de lágrimas. —No es tu culpa, ahora descanza por favor deja de torturarte.—habló la señorita Kim y se retiró de la habitación.

Minho lloró todo lo que no lloró en su vida entera, se habia dicho a sí mismo las cosas mas hirientes que podia decirse un ser humano. No podia ver a las personas que amaba sin vida, tan sólo imaginárselo era suficiente como para revolverle el estómago y seguir culpándose por lo sucedido. No se dió cuenta cuando cayó en un profundo sueño y despertó la mañana siguiente viendo el brillante sol entrar por la ventana del hospital, el sonido de la pantalla que mostraba como iba su corazón estaba volviéndolo loco. Por un momento habia sido tan estúpido como para creer que todo habia sido un sueño horrible, pero no era así.

—Señor Lee puedo pasar? —preguntó una voz masculina detras de la puerta recibiendo un sí por parte de Minho. —Soy Kim Woojin, voy a estar cuidándote y ayudándote con tu terapia de rehabilitación. —dijo Kim haciendo una reverencia luego de hablar.

—Lee Minho. —respondió el menor dando una leve reverencia con su cabeza debido al dolor de su cuerpo.

—Es mi obligación decirle qué heridas tiene en el cuerpo y cuánto tiempo llevará sanar lo suficiente para que le den el alta. —habló Kim con una sonrisa amigable mientras abría su planilla. —Tiene fractura de tobillos, sufrió de una grave dislocación de hombro por eso lleva la venda allí, varios cortes en su piel y tuvo un poco de sangrado en su cabeza proveniente de un corte con vidrio pero por suerte no fue profundo, tiene dos puntos de sutura. —habló Woojin cerrando su carpeta.

—Algo más? —preguntó sarcásticamente Lee.

—No señor, para las heridas de piel con varios medicamentos podremos sanarlo rápidamente pero sus tobillos no se curan tan rápido. Le tomara al rededor de cuatro meses aproximadamente volver a caminar. Alguna pregunta? —habló Kim.

—Estaré en silla de ruedas? —preguntó Lee.

—Sí señor. Necesita que se la traiga ahora y lo lleve a tomar aire por el patio? —sugirió Kim amablemente.

—Por favor. —asintió el pelinegro.