TROUBLE (INOTAN) (OMEGAVERSE)

I.- "Lápiz"

Omnisciente

— ¡Suéltame! — cierto alfa luchaba por liberarse de los brazos de su amigo.

Daba patadas y golpes al aire, intentando safarse y correr para realizar su cometido.

Unas cuantas personas comenzaban a voltear sus cabezas en dirección a ese par, lo bueno que la música en esa fiesta era tan alta que no se escuchaban mucho a estos dos peleando.

Igual los demás jóvenes que estaban ahí no se encontraban en muy buen estado, alcoholizados, drogados y otros hasta dormidos con vomitos por ahí.

— ¡Inosuke, para! — el de cabellos azules era más fuerte normalmente, en ese momento Zenitsu no sabía ni de dónde sacaba fuerza para contenerlo.

— ¡Déjame idiota! — gritó al ser jalado hacia atrás — ¡Zenitsu juro que si no me dejas te irá mal! — algunas palabras le salían cortadas o alargadas.

El de cabellos rubios intentaba mantener a su amigo en calma, como siempre Inosuke buscaba pelear solo para demostrar tontamente que es el mejor en todo.

Esta vez se puso como loco solamente porque alguien le miró mal y si, tenía ganas de agarrarlo a golpes.

Zenitsu ignoró sus gritos, acostumbrado a ese tipo de cosas, lidiar con Inosuke borracho o drogado era algo común para él.

Así lo llevó hasta el baño del lugar, sin importar estar chocando con los demás.

Lo lanzó dentro de este, cerrando la puerta con seguro, quedando ambos encerrados.

— ¡Ven aquí! — lo agarró del cabello y a jalones lo llevó al lavamanos.

— ¡Suéltame! — el rubio comenzó a mojar la cara del chico, esperando bajar así un poco el mal efecto que trae.

— ¡Ya es la maldita segunda vez que intentas pelear! — se quejó como madre proecupada, lavando la cara de Inosuke.

Inosuke es el chico problemático, más aún bajo el efecto del alcohol y demás; rebelde, tonto y terco son las palabras que lo describen.

— ¡Suéltame, maldita basura! — empujó al más delgado casi haciéndole caer.

Zenitsu e Inosuke son como mejores amigos.
Bueno, únicos amigos ya que ninguno de los dos interactúa con más personas.

Casi nadie aguanta al llorón miedoso de Zenitsu y en tanto a Inosuke era lo mismo pero por otras razones, a él no se le acercaban mucho por ser toda una bestia.

Ni ellos saben cómo es que llegaron a ser amigos, aunque Zenitsu no podía olvidar el primer día que se vieron.

Confundió a Inosuke con una chica y el mismo alfa lo agarró a golpes.

— ¡Te quiero ayudar! — gritó el omega desesperado.

— ¡No necesito tu ayuda, inútil! — le señaló con enojo — ¡Necesito matar a ese imbécil! — se fue corriendo hacia la puerta y cuando la abrió justo golpeó la frente del rubio más no le importó, siguió corriendo en dirección a su víctima.

— ¡Inosuke!

[...]

— No me hables... — el rubio estaba más que cansado.

Ir a esa fiesta cuando al día siguiente tenían clases fué una mala idea.
Muy apenas podía tener sus ojos abiertos.

— ¡No me dirás qué hacer! — el de ojos verdes desde la mañana estaba energético.

— Mucho ruido... — Zenitsu cubrió sus oídos con ambas manos.

Inosuke estaba por pelear aún más por haber sido ignorado pero alguien le robó la atención.

El chico nuevo de hace como una semana, de nombre Tanjiro Kamado, un bonito omega.

Siempre sonriente y de buen ánimo; desde aquel primer día se llevó la atención de uno que otro alfa, entre estos, Inosuke que ni él sabe porque pero siente algo en tanto a ese omega.

Inosuke le sonrió ampliamente, parecía más una mueca de animal gruñendo, al menos lo intentaba.

Una vena se saltó en la frente del alfa, Tanjiro ni cuenta se había dado de aquella sonrisa, ni siquiera lo vió por un segundo.

— ¡Eh! — exclamó Zenitsu asustado cuando su amigo golpeó la mesa con su puño — ¿Puedes estar tranquilo al menos unos minutos? —

— Ese estúpido omega será mi esposo — gruñó bajo.
Inosuke no sabía ni de modales o de cómo comportarse como una persona normal, él es extremo.

— ¿Sigues con eso? — desde la semana pasada que Tanjiro llegó a su salón, Inosuke no paraba de decir que sería suyo.

Eso no eran más que palabras vacías, ya que aún no se atrevía a hablarle.

— Solo tienes envidia porque lo prefiero a él — Zenitsu rió bajo.

Primero loco antes que sentir atracción por el lunático de Inosuke.

— Si, ajá — rodó los ojos mientras el alfa sonreía egocéntrico.

Siempre con sus aires de grandeza.

— Iré a pedirle un lápiz — al menos así tendría un poco de contacto con él, ¿No?

— Pero si ya tienes... — Inosuke partió su propio lápiz por la mitad — ¿Por qué tienes que ser tan cavernícola? — sin duda no había un alfa como él.

Una rasposa risa salió de la garganta de Inosuke que se levantó de su silla determinado a ir con ese lindo omega.

Como si fuese su territorio, caminó empujando a quien sea que se pusiera en su camino.

Nadie le reclamaba, sabían bien que Inosuke no era con quién meterse.

— Hey — llegó con Tanjiro que estaba relajado sin notar la fuerte presencia del alfa.

— Hola — sonrió mirando los ojos verdes del otro.

Tanjiro es el chico más amigable y cero prejuicioso que existe, así que no le importaba esa pinta de chico malo de Inosuke.

— Dame tu lápiz — ¿Era necesario decir que Inosuke no tenía ni un poco de tacto? — Ahora —

— Eh... — Tanjiro asintió lentamente — ¡Claro! — sin pensarlo mucho, regaló su lápiz al alfa, a fin de cuentas tenía algún otro en su mochila.

Inosuke sonrió superior tomando el lápiz.
Sin agradecer dió la vuelta regresando a su lugar ahora con un nuevo lápiz.

— Está enamorado de mi — dijo sonriente — me lo dió — mostró el pedazo de madera.

— ¿Será por qué lo exigiste en vez de pedirlo? — Zenitsu había escuchado todo aquello.

— Lo hizo porque sabe que soy genial — no había nadie que lo bajara de esa nube de egocentrismo — Más tarde le pediré su comida...

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Hola jsjsjsjs
Chiks pues apenas con el primer capítulo!

Espero les vaya a gustar como haré la historia y demás, es mi primera de este shipp así que pues uwu

Intentaré actualizar rápido, entre más apoyo mejor ;)

Cya
-Manuel.