VI

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Querido amigo:

Hoy es sábado, no tengo clase los fines de semana, gracias a Dios. Pensé que tendría que ir también los sábados a la universidad, ya me habia mentalizado para lo que se venía, pero en mi horario no tengo clases, por ahora. Puede que algún día a algún profesor se le atrase su materia y tenga que tomar clase algún sábado. Esperemos que ese no sea el caso.

Ir a la universidad es un cambio muy drástico y más para las personas que no le gustan las cosas nuevas como a mi. Aunque me sentí ansiosa al principio por ir a la universidad, luego de ir estos días debo contarte que no me gusta el ambiente. Tengo que adaptarme. Estar cerca de todo tipo de personas me estresa, y más cuando esas personas viven de la falacia queriendo aparentar lo que no son ni tienen.

Es cierto cuando dicen que conoceremos a todo tipo de personas en aquel lugar. Pero yo no diría conocer, sólo lo tacharia diciendo que presenciamos.

De mi grupo hasta ahora somos 40, la mayor parte del tiempo nos dividen en dos grupos. Al ser tantos de mi mención no cabemos en todas las aulas que nos pueden asignar. Por ende, de vez en cuando tengo clase con diferentes chicos de mi generación. Puedo decir que más o menos ya he seleccionado mi grupo de compañeros con los cuales puedo socializar. Entre mis compañeros de mención existen las clases y los estereotipos. Es lo que he presenciado hasta ahora. Me aterra pensar en que posiblemente tendré que pasar cuatro años de mi vida viendo a estas personas. No quiero adelantarme a los sucesos, pero estoy viendo comportamientos que no me agradan.

14 de Septiembre 2019
Hasta luego, A

Diario de una universitariaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora