Diario de una universitaria

XI

Querido amigo:

Siento no poder escribirte estos días. Ha sido una semana muy intensa, por así decirlo. Tuve examen de Aritmética el martes y el miércoles examen de Psicología. Sentía que quedaba sin materia gris en mi cerebro, mis neuronas se consumían. Hoy por fin, ya estoy calmada, el estrés disminuyó un poco, no digo totalmente porque aún no se qué puntuación obtuve en Psicología, la verdad siento que no me fue muy bien. Espero no haber perdido muchos puntos. En Aritmética perdí 2.5 puntos del total que debía obtener, no fue la mejor puntuación, pero es lo que merecía, hice todo lo que pude y sabía del examen.

El día de hoy ha sido extraño e incómodo. Empezando porque hoy temprano después de un mes y medio llegó mi amigo Andrés, y revolteo todo a su paso. En el transporte fue toda una travesía, el bus estaba repleto de personas, todos apretados. Sentía que me dejaban sin aire en mis pulmones cada vez que pasaban detrás mio, luego de vuelta a casa, me sentí super extraña, sentía el aire denso, estaba preocupada pero no había una razón específica. Te juro que sentí que hoy era mi último día, me pregunté que si las personas antes de morir lo sentían, quise saber cómo me sentiría yo o qué pasaría conmigo cuando llegará el día. Todos conocemos el día de nuestro nacimiento, pero no el día en que perecemos. Algún día nos llegará a todos, es la ley de la vida. Me aterra no poder saberlo, porque no lo deseo.

Hace muchos años quise morir, hice algunos intentos que obviamente fueron fallidos. Sin embargo, ahora no quiero partir a la otra vida (si es que haya alguna después de la muerte). Existen muchas hipótesis y mitos acerca de la vida después de la muerte, vi en una ocasión uno de los tantos dramas coreanos que he visto, que cuando moría alguien llegaba una parca (Ángel de la muerte) a buscarte y te llevaba a su oficina. Si habías hecho el mal, te daba un té para que se borrarán tus recuerdos y tu memoria quedará en blanco  (era un castigo) porque cuando cruzabas al otro mundo no tenías memoria alguna de tu vida anterior.

10 de octubre 2019
Hasta luego, A.