19. Sangre Fría.

407 41 24
                                    

No soy el único viajero que no ha pagado su deuda.
He estado buscando un rastro que seguir de nuevo.
Llévame de vuelta a la noche en la que nos conocimos.

– Lord Huron (The night we met)

⋘ ──── ∗ ⋅◈⋅ ∗ ──── ⋙

Sus pasos era rápidos, el sudor de su frente impregnaba su bolsa de craft a manera de diminutas manchas, se había deshecho de la horrible bata negra que lo obligaron a usar con anterioridad, ahora había vuelto a su típica vestimenta, había vuelto a ser él, los latidos de su corazón iban a mil por hora, trataba de respirar por la nariz, pero no era tan simple. Hoy era el día.

Se despertó muy temprano, nuevamente el día estaba nublado y con ventiscas muy fuertes, anunciando que la lluvia podría asentarse muy pronto.
Le pidieron que examinara a Demencia una vez más antes de partir a la sede, en donde se llevaría a cabo el evento de los héroes y exhibición de sus "logros". Flug ya había revisado a la chica lagarto en la mañana, pero al caer la tarde le dijeron que volviera a hacerlo, y así evitar errores, lo más seguro sólo fué que deseaban que Demencia no muriera o algo así de camino allá.
El científico aún no le había hecho saber a Demencia sobre su plan, sin embargo, era justo ahora que lo llevaría a cabo, solo deseaba que las circunstancias estuviéran a su favor. Su estrategia consistía en colocar una bomba en cada piso de la instalación, para eso, tuvo que moverse rápido y en silencio, hackeo cada una de las cámaras del lugar que vigilaban los pasillos y habitaciones, con ayuda de su celular y un programa especial, había logrado dejar inactivas todas las cámaras en un determinado tiempo, de a cuerdo al piso y lugar en donde colocó las distintas bombas, todo pareció caminar como reloj, pues al parecer nadie lo había notado ni descubierto, pero sólo faltaba el paso final, sacar a su Alebrije de la jaula. Por extraño que parezca, a Flug se le figuró que todo resultó fácil, demasiado para su gusto, decidió que se mantendría a las vivas por cualquier cosa.

Llegando a su destino, Flug rápidamente tecleó la contraseña de la entrada a las celdas, impaciente y nervioso, menos mal que nadie a excepción de Demencia estaba ahí para notarlo. Cuando las puertas abrieron, él entró corriendo hasta la prisión de la chica, ella al verlo tan exaltado, se levantó de su colchoneta en el suelo e inmediatamente fue a recibirlo, aunque sus muñecas estaban nuevamente sujetas por un dispositivo metálico, muy parecidas a las esposas comunes de la policía, solo que estas requerían de una especie de llave especial para abrirlas. Sí, como todo en ese lugar, al parecer se tomaban la seguridad muy en serio, tanto que incluso Demencia pudo violarla. Idiotas. Pensó.

De nuevo, Flug introdujo la clave de acceso y se adentró para alcanzar a Demencia. Flug la abrazó en cuanto la tuvo cerca, con la respiración agitada, se tomó un momento para hablarle, a ella le hubiera gustado corresponderle, pero con la manos cautivas, únicamente se dejó querer. Sin embargo, su confusión la golpeó cuando se dio cuenta de algo inusual en la situación.

— ¿Flug qué pasa?... ¿Te encuentras bien? ¿Qué haces aquí?.

— Cómo que qué hago aquí, me enviaron para revisarte una última vez antes de que partan, pero en realidad es hora de que nosotros nos vayamos Dem, si mi plan marcha de a cuerdo a lo previsto, no tendremos problemas para salir. — decía mientras liberaba de su prisión metálica las muñecas de la chica.

— ¿Para que me revisaras?... Espera, a mi me dijeron que ya no era necesaria mi examinación...

— ¡¿Qué?!.

— Sí... — Demencia de pronto se puso cabizbaja — dijeron que ya no vendrías y que no te volvería a ver más.

— ¿Quién te dijo eso?.

AWAKE AND ALIVE (Demenflug ❤)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora