25. Hush-a-bye. [Final]

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"Así que no te preocupes, M'sieur Marius, no siento ningún dolor.
Hush-a-bye, querida Eponine, no sentirás ningún dolor. Una pequeña caída de lluvia, difícilmente puede lastimarte ahora. Estoy aquí. Y me mantendrás a salvo. Y me mantendrás cerca. Me quedaré contigo. Hasta que estés durmiendo.
Y la lluvia hará que las flores... crezcan".

Les Miserables (A Little Fall Of Rain).

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—Talvez es mi falta de sueño, pero no puedo ver una mujer con toga en esas estrellas Flug. —dijo Mariana, recostada hombro con hombro al lado de Kenning, ambos sobre una manta en el pastizal del suelo, mientras contemplaban el oscuro firmamento, adornado por las hermosas constelaciones que aún no habían sido cubiertas por el smog y contaminación de la ciudad.

—Es Démeter, y su hija Perséfone, ella fué raptada y llevada por Hades al inframundo, así que Démeter pidió la ayuda de los dioses para encontrar a su hija. Pero cuando Hades le ofreció a Perséfone su oportunidad de ser libre, para sorpresa de todo el mundo, Perséfone eligió vivir con el príncipe de la oscuridad. —explicó Flug, con ambas manos juntas sobre su pecho. —¿De verdad estás segura de esto?... Me refiero a irnos lejos y encontrar un lugar donde construir una vida juntos.

—Mientras los dioses no nos cazen, ¿por qué no? —respondió Demencia con una sonrisa traviesa, volteando sobre su hombro para observar mejor a su novio. —Oye, te tengo otra sorpresa, es tu regalo de cumpleaños definitivo.

Flug la miró confundido.

—No entiendo, ¿aún hay más regalos?

—¿De verdad pensaste que una simple magdalena de mantequilla con una velita clavada en el centro, y este intento de picnic eran tu regalo?... Pues sí, también, pero te tengo algo mejor. —del interior de una mochila que llevaba, Mariana sacó un paquete de tamaño mediano.

—Feliz cumpleaños Flugbug —le dijo ella mientras acercaba la caja envuelta en papel decorativo hasta él. El científico la tomó y decidió abrirla con calma, estaba emocionado y feliz por los detalles que su pareja tenía con él, sin duda, era muy afortunado.
Cuando al fin divisó el contenido del interior, se quedó sin palabras, metió sus manos cuidadosamente y sacó su obsequio para observarlo mejor;
era un Avión Spitfire Mk V, Revell Alemana, a escala 1/72.

- Un... Revell Alemana. Es... increíble. - la sorpresa y emoción que sentía Flug era indescriptible, realmente estaba fascinado, ella bien sabía que su punto débil son los aviones.

-Y bueno... ¿te gustó?

Flug la miró y comprendió que esos hermosos ojos que lo veían curiosos esperando una respuesta, serían los mismo ojos que le gustaría ver por todos y cada uno de los días de su vida.

-¿Que si me gustó?... amor, esto es...es fantástico...yo, bueno, muchísimas gracias... me encanta, los aviones me encantan... al igual que tú.

Mariana lo observó con una sonrisa, y lágrimas de felicidad le quisieron brotar, pero no era ni el momento ni el lugar para ponerse sentimentales de más. Kenning le sonrió también y devolvió su mirada de nuevo a su obsequio, notó que de un ala del avioncito colgaba una nota, en ella se redactaba el más simple y sincero de los deseos:

"Para mi piloto y científico favorito,
no atrevas a olvidar el sol, amor.
Te amo."
Atte: Mariana


No, Kenning Flugslys no se atrevería a llorar frente a su novia, a pesar de sentir la necesidad.
Mantuvo la vista fija en aquel avión a escala acunado en sus manos, sin embargo, las esquinas de su vista se comenzaron a volver oscuras y borrosas, como si se estuviera teletrasportando a otro plano, a otro escenario, y así ocurrió.
De pronto, ya no estaba sentado sobre la manta en el pasto, si no, sobre su propia cama, ya no estaba tampoco acompañado, si no, completamente a solas. Rápidamente se dio cuenta de que todo su entorno pasó de ser un campo con un picnic a la luz de luna, a su habitación personal en la mansión de Black Hat.
Flug simplemente estaba ahí, en silencio, con la melancolía a flor de piel, acariciado con ambos pulgares cada parte de su avión coleccionable. Entendió que aquel objeto pasaría a ser ahora un recuerdo doloroso, puesto que antes solía ser bonito y triste. Siempre lo había conservado al alcance, casi a la vista de cualquiera que lo notara, como la primera vez que Demencia entró a su habitación a esculcar sus pertenencias.

AWAKE AND ALIVE (Demenflug ❤)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora